¿Qué impulsa a los religiosos a esos nefastos proselitismos?
Hay un vídeo que se hizo viral en 2018. Ana Kasparian lo dijo muy clarito. Voy a transcribir sus palabras porque no sobra ni falta nada, y ella se refiere al cristianismo, pero se puede aplicar a todas las religiones:
No me importa que seas cristiano, no me importa lo que diga la biblia. Siento que es una ridiculez estar aquí sentados intentando descifrar lo que tu librito fantástico opina sobre asuntos políticos reales. No me importa si eres cristiano, de hecho, lucharé para que tengas libertad religiosa y practiques tu cristianismo. Creo en eso. Yo no creo en el cristianismo, lo que significa que tú no puedes decirme cómo vivir mi vida con base en tu religión. No me importa lo que diga la biblia. Tú tienes todo el derecho del mundo. Todas las mujeres que se identifican con tu religión tienen todo el derecho del mundo a no abortar ni a usar anticonceptivos, pero no tienen derecho a dictar mi vida ni lo que decido hacer con mi cuerpo. ¡No me importa tu maldita religión! Estoy tan cansada de tener conversaciones interminables sobre lo que dice la biblia. Tú vive tu vida de acuerdo a cómo interpretes la biblia. De nuevo: no me importa. Pero no puedes tomar la biblia y decirme: “La biblia dice esto y lo otro en el capítulo tal, versículo tal…”. No me importa. No creo en ella. Y tengo el derecho, con base en nuestra constitución, a no creer en ella. Ana Kasparian.
El fanatismo religioso
Los religiosos alegan “libertad” religiosa para “evangelizar sin coacciones” de la misma manera que las empresas tratan de atraer nuevos clientes, las religiones hacen lo posible para captar adeptos que “descubran la fe”. A los propios religiosos no les gusta que se utilice el término proselitismo pues, según estos, hace alusión a sectas y no a religión.
El proselitismo es ese empeño o afán con que una persona o una institución tratan de convencer y ganar seguidores o partidarios para una causa o una doctrina. Es la forma en que las religiones buscan incorporar adeptos y fieles a sus doctrinas. Resulta que se hace proselitismo para ganar prosélitos. Un prosélito es una persona incorporada a una religión o un partidario ganado para una facción o parcialidad. El prosélito es la persona que se ha adherido recientemente a una causa, ideología, una colectividad, un partido político, o la persona que se ha convertido recientemente a una religión.
El proselitismo religioso se vale del convencimiento y la persuasión de personas para ser convertidas a la nueva creencia. En el cristianismo, el proselitismo religioso, también conocido como evangelización, se fundamenta en el la gran comisión de Jesús, según la cual los cristianos tienen el deber de hacer discípulas de la fe de Cristo a las personas de todas las naciones:
“Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles todas las cosas que os he mandado” (Mateo, 28: 19–20).
En la exhortación apostólica evangelii gaudium del papa Francisco dice:
Los cristianos tienen el deber de anunciarlo sin excluir a nadie, no como quien impone una nueva obligación, sino como quien comparte una alegría, señala un horizonte bello, ofrece un banquete deseable. La Iglesia no crece por proselitismo sino «por atracción»[13].
Entonces tenemos miles de escritos sobre qué es esa atracción ejercida por el amor de Cristo.
Recalco que eso que llaman Cristo es una figura religiosa que no parece que existiera, pero que sí fue el pretexto para montar una industria llamada “religión cristiana” que está durando ya 2000 años.
Las religiones necesitan los proselitismos que les hacen los fieles, adeptos y fanáticos.
Los religiosos no gustan usar el término proselitismo porque dicen que es una palabra que se usa por los medios de comunicación de la sociedad occidental con una evidente carga peyorativa.
Las religiones no entienden que la religión es algo privado, de cada persona y familia. Pero tenemos en la sociedad una carga de proselitismo religioso tanto activo (ir por las casas o abordarte por la calle), como pasivo (buzoneo de pasquines, stands de publicidad por las calles, etc). Las prebendas que reciben las religiones por parte del estado, y aquí en España en concreto la religión católica, es exageradisimo.
La mentira del derecho a saber sobre amigos imaginarios
Eso de que es un derecho hacer proselitismo cristiano, o musulmán o la religión que sea, es la chorrada que se han inventado para continuar con su industria que a lo largo de los siglos ha dado muchos beneficios. Los religiosos dicen que:
“tienen el derecho y el deber de hablar de dios, que es un tema humano, porque se han inventado que el tema de dios es lo más profundo que brota en el corazón del hombre”.
Algo que esta gente no comprende es que el mismo derecho que tienen ellos a desparramar sus chorradas sobre amigos imaginarios, yo también tengo derecho a que no me molesten con sus proselitismos de sus amigos imaginarios.
Sus creencias irracionales no tienen que interferir en la vida cotidiana mía.
Que no tengo que aguantar sus victimismos voraces con unos alegatos muy estudiados desarrollando unos discursos elaborados para mostrar su razón de ser. Las religiones como la cristiana se han erigido como portadores de la verdad, la luz y la razón. La verdad que ellos digan, la luz que ellos digan y la razón que ellos digan. El moderno victimismo que practican los religiosos cristianos en España es que no aceptan la desacralización del mundo en el que viven porque su aspiración es que la iglesia someta a la sociedad a su nefasto credo, lo mismo que hicieron durante siglos. Estos desnortados fanáticos cristianos, o musulmán, o lo que sea, son anacronismo humanos, frenos sociales, nostálgicos alejados de la realidad de la época en la que vivimos.
Resulta que tenemos una país que es un estado aconfesional:
Nuestra Constitución dice:
Título I. De los derechos y deberes fundamentales
Capítulo segundo. Derechos y libertades
Sección 1.ª De los derechos fundamentales y de las libertades públicas
Artículo 16
- Se garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos y las comunidades sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público protegido por la ley.
- Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias.
- Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
Entre lo que califico de voraz proselitismo incluye que desde el nacimiento ya se involucre al neonato en la religión por medio del rito del bautismo, que no nos engañemos, eso no quita el delirante absurdo que llaman “pecado original”, ya es el primer paso para pertenecer a la industria del cristianismo.
Se escudan en el artículo 27 de la Constitución Española que siempre, siempre se dejan a medias:
Título I. De los derechos y deberes fundamentales
Capítulo segundo. Derechos y libertades
Sección 1.ª De los derechos fundamentales y de las libertades públicas
Artículo 27
- Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza.
- La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales.
- Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
- La enseñanza básica es obligatoria y gratuita.
- Los poderes públicos garantizan el derecho de todos a la educación, mediante una programación general de la enseñanza, con participación efectiva de todos los sectores afectados y la creación de centros docentes.
- Se reconoce a las personas físicas y jurídicas la libertad de creación de centros docentes, dentro del respeto a los principios constitucionales.
- Los profesores, los padres y, en su caso, los alumnos intervendrán en el control y gestión de todos los centros sostenidos por la Administración con fondos públicos, en los términos que la ley establezca.
- Los poderes públicos inspeccionarán y homologarán el sistema educativo para garantizar el cumplimiento de las leyes.
- Los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los requisitos que la ley establezca.
- Se reconoce la autonomía de las Universidades, en los términos que la ley establezca.
Dejo para otro día las referencias a los Derechos Humanos de 1948 en adelante en lo referente a los derechos de tener, recibir, impartir las diversas religiones que hay en el planeta.
Fabricar fanáticos
Se ha escrito mucho que el fanático capaz de realizar conductas extremas son personas que tienen un pobre estatus social, sin cultura, con propensión a una regresión infantilista. Bueno, parece que los fanáticos que van emergiendo en esta cultura occidental nuestra no da ese perfil. Esa idea de que el fanático adopta una posición de obediente procesador de consignas, dictadas por los líderes o figuras carismáticas, abdicando del pensamiento y deviniendo un autómata que reproduce ideas estereotipadas o cumple tareas encomendadas de forma ciega y compulsiva, hay que dejarlo de lado.
Que algunas personas consideren que un libro fantástico como la biblia está por encima de la Constitución, y además estén dispuestos a realizar conductas extremas para reforzar la idea: la biblia está por encima de la Constitución. Estos seres han considerado que su idea irracional defendiendo su religión es absoluta, infalible, eterna, predestinada a vencer, es una norma suprema de acción a obedecer.
Su pensamiento es concreto y dicotómico, sin matices, sin discriminaciones, sus ideas e ideales se han maximizado, sacralizado, sus creencias irracionales no admiten examen y excluyen completamente la libertar de pensar.
Se sienten orgullosos de sus ideas y así lo exhiben, se perciben a sí mismos como personas asertivas, enérgicas y autoconfiadas, sinceros y realistas. No confían en otros y tienen un sentido combativo tenaz, sólo confían en los autoderechos que les da su intransigencia al margen de la realidad.
Su rigidez cognitiva los hace obstinados, repetitivos, cansinos. Sus prejuicios son sus derechos, no pueden cambiar de opinión. Presumen de intolerancia ante grupos sociales, étnicos, no perciben los distintos matices de la compleja realidad, tienen y manifiestan una visión dicotómica opuesta.
Están emergiendo grupos de apoyo en internet para exmiembros de organizaciones religiosas. Los relatos de las experiencias de sufrimiento, angustia, enfado e indefensión aprendida se aparta mucho de esos proselitismos de amor que tanto gusta predicar a los religiosos.
Las religiones provocan traumas, eso es un hecho. Se está elaborando una teoría llamada Síndrome de Trauma Religioso que está desarrollada por la doctora Marlene Winell. Las amenazas de sufrimiento eterno, de ser abandonado o separado de dios o de sus padres, la sugerencia de que alguien en el pasado pagó anticipada y sangrientamente por sus pecados como es la historia de ese que llaman Jesús y no se sabe si existió o no, no debería ser parte de la formación de ningún niño.
La educación religiosa como forma de abuso de la infancia es una idea digna de considerar, en tanto que el niño no tiene forma de defenderse del atropello cognitivo de sus mayores. El problema no es que el niño padezca de síntomas post-traumáticos de algún tipo sino que un adoctrinamiento basado en el temor, y amenazas implícitas, afecten el desarrollo óptimo de una personalidad autónoma.
Los movimientos religiosos han hecho lo posible para crecer, para denostar a los que han considerado enemigos, indicar que las mujeres tienen su lugar bajo el yugo del hombre, que las personas LGTBIQ+ no caben en ese presunto reino de los cielo, los métodos anticonceptivos están vetados, intervenciones para salvar la vida de la persona gestante si hiciera falta no se realizan, se tienen que encomendar a los designios divinos de ese diosito.
En fin, el fenómeno religioso tiene que quietarse del lado cotidiano, tiene que ser vivida en la intimidad y que no se adoctrine a los bebés y la infancia en base a miedos por seres fantásticos.
Seguiré hablando de esto
Bibliografía:
https://twitter.com/marlenewinell
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1135-76062010000200001
https://www.boe.es/biblioteca_juridica/anuarios_derecho/abrir_pdf.php?id=ANU-E-2001-10017900192
http://luisgpope.blogspot.com/2014/10/el-sindrome-del-trauma-religioso-es-real.html