Libelos de sangre
En 1965 tras el Concilio Vaticano II Pablo VI hizo una declaración llamada “Nostra Aetate”. Sobre las relaciones de la iglesia con las religiones no cristianas.
Quedó zanjado el tema, para el Vaticano, de la acusación de deicidio, ya saben, ese tema tan importante como es que los judíos sentenciaron a muerte a Jesús, persona que no está claro si existió, y no está claro que hubiera ese proceso “judicial”.
Durante siglos se ha culpado a los judío de esa sentencia de muerte que no se sabe si se produjo. Eso sí, la leyenda de esa supuesta sentencia de muerte en la cruz de un señor que no se sabe si existió creció, creció hasta formar una religión, una religión que se ha mostrado tan grande que lleva casi 2000 años demostrando que es la empresa parasitaria más potente que hay en el planeta.
Esta empresa religiosa que no tiene rival y que a lo largo de los siglos ha tenido diversos enfrentamientos entre sus mandamases, por motivos de expansión han producido mucho dolor a la sociedad y que sus cismas han dado paso a nuevas franquicias, algunas muy enfocadas en pederastia y pelotazos urbanísticos.
Así las cosas, bueno, la mayoría de cristianos no se ha enterado que desde el Vaticano “se ha perdonado a los judíos a través de la declaración “Nostra aetate””. Tenemos a unos cuantos adeptos a la industria de la religión cristiana que aún siguen pregonando un antijudaísmo voraz. Un antisemitismo desconocedor de lo que significa ser semita, y que les gusta mucho presumir de esas manifestaciones de odio.
Semitismo/Semita/Semítico
Se llama semitismo al conjunto de doctrinas, cultura y costumbres de los numerosos pueblos semitas. Los pueblos semitas están formados entre otros por árabes, hebreos, arameos, etc.
Aquí nos encontramos con conflictos históricos severos, sí, severos. Que las fuentes que indiquen los diversos orígenes de los pueblos de ese territorio que se llama Mesopotamia (Mesopotamia significa literalmente “entre ríos”, fértil zona geográfica comprendida entre dos ríos, el Tigris y el Éufrates, actualmente la zona norte situada entre Siria e Irak) sean referencias a libros religiosos, deja un poco en el aire las certezas sobre este tema tan interesante e importante.
Recomiendo este visionado de una conferencia realizada en Alcoy en 2015 en la que Ana María Vázquez Hoys habla de “La historia empieza en Summer”.
Y como no tengo idea de Summer, sigo con lo que estoy intentando exponer aquí. Estaba diciendo que “semita” (deriva del hijo primogénito de Noé bíblico llamado Sem) es un concepto amplio. Bueno, asuntos bíblicos aparte, el pueblo semita vivía por esta zona.
La región tradicional de las lenguas semíticas es el Asia occidental, en particular Arabia, Mesopotamia y Siria-Palestina.
Y como no estoy preparada para meterme en los vericuetos de la laberíntica historia, sólo quiero indicar de dónde viene una palabra/concepto que a lo largo de este texto va a salir varias veces, semítico. Lo que quiero contar va por otra parte. Sí que me gusta poner el contexto de lo que hablo para que la comprensión del tema sea mucho mayor.
Un poco de historia de la Península Ibérica
A lo largo del siglo X empezaron a vislumbrarse acusaciones estratégicamente diseñadas contra los judíos en diferentes zonas de lo que hoy conocemos como Europa. Entre otras justificaciones se emplearon los ataques contra la población judía a modo de válvula de escape de los problemas sociales. Fue norma que los judías no pudieran ejercer como soldados, agricultores, abogados y casarse con cristianos. Que estuvieran relegados a profesiones como prestamistas (usureros) o recaudadores fue aliciente para aumentar los prejuicios contra este colectivo humano. En la península Ibérica se tiene constancia de la población judía desde el siglo IV d.n.e.
Más o menos fue entre los años 409 y 411 los pueblos “bárbaros”, así los denominaban los romano, como fueron los alanos (del Cáucaso), vándalos (de la actual Polonia) y suevos (germánicos) acordaron el reparto del territorio de la península Ibérica. Comunidades judías ya estaban asentadas en diferentes zonas de la península.
El pueblo germano denominado “visigodo” procedía del noroeste de Europa. Llegaron a la península Ibérica como aliados de los romanos.
Los romanos les cedieron tierras en las Galias, donde establecieron el Reino visigodo de Toulouse. De allí, fueron expulsados por el pueblo franco (Batalla de Vouillé, 507). Tras su expulsión por el Reino Franco de las galias, forman en la península un nuevo reino visigodo con capital en Toledo.
El rey Leovigildo (568–586) consigue extender los dominios del reino de Toledo, invadiendo el reino suevo, situado en las provincias de Gallaecia y Tarraconensis, y sometiendo a las tribus astures y cántabras.
Se dice que la capital de ese reino visigodo estaba en Toletum (la actual Toledo). La creencia religiosa de los godos (y de los pueblos germanos que se vinieron a vivir a la península Ibérica en general) era el arrianismo.
El arrianismo es el conjunto de doctrinas cristianas expuestas por Arrio (253–336), un presbítero de Alejandría (Egipto), se cree que el origen de Arrio es libio de etnia bereber. Él sostenía que Jesus era hijo de Dios, pero no Dios mismo. El tema de la divinidad de Cristo fue un quebradero de cabeza. Esta creencia produjo muchas luchas internas y división de los católicos.
El arrianismo fue condenado como herejía en el primer Concilio Ecuménico de Nicea (325). A la exaltación divina por la cual calificaron a Jesús como dios se le llama Símbolo Niceno, viene a ser un credo que dice así:
“Creemos en un solo Dios, Padre todopoderoso, creador de todas las cosas, visibles e invisibles. Creemos en un solo Señor Jesucristo, Hijo de Dios, engendrado sólo por el Padre, o sea, de la misma sustancia del Padre, Dios de Dios, luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza que el Padre, por quien todo fue hecho en el cielo y en la tierra, que por nuestra salvación bajó del cielo, se encarnó y se hizo hombre”.
Por supuesto que se redactó un anatema contra Arrio:
“En cuanto a aquellos que dicen: hubo un tiempo en que el Hijo no existía, o bien que no existía cuando aún no había sido engendrado, o bien que fue creado de la nada, o aquellos que dicen que el Hijo de Dios es de otra hipóstasis o sustancia, o que es una criatura, o cambiante y mutable, la Iglesia católica lo anatematiza”.
El año 336 murió Arrio, supuestamente envenenado. Ulfilas, obispo y misionero, propagó el arrianismo entre los pueblos germánicos, los visigodos, vándalos, burgundios, ostrogodos y más. El arrianismo se mantuvo hasta el siglo VI cuando Recaredo I se bautizó como católico en el año 587 e impuso el catolicismo en su reino.
El arrianismo era, y es porque las herejías no se van de la industria religiosa, una herejía del cristianismo. Así que nos encontramos que aparte de las luchas de poder entre “los bárbaros” y el Imperio Romano, que ya tenía establecido como religión de estado el cristianismo, tenemos a los godos haciendo de las suyas con una creencia divina “herética”, el arrianismo.
Un inciso. Un “luchador contra las herejías” fue Agustín de Hipona (354–430) un obispo que nombraron padre y doctor de la iglesia, lo llaman “vencedor de herejes”, sí, los fanatismos religiosos tienen esas cositas, nombran a cualquiera que tenga verborrea a favor de la industria religiosa del momento con “títulos rimbombantes”. En fin. Una cosita más para tener en cuenta cuando nombran los “patrióticos” que “España” ya era “España” en el año 400. Y no, a ver, la invasión goda que hubo en la Península Ibérica tenía la ideología religiosa llamada “arrianismo”, algo que los cristianos católicos romanos consideraban herejía. Pero eso son minucias para los “patriotas”. Sigo.
Se dice que había cristianos en el siglo III y los inicios del siglo IV en lo que los romanos llamaban Hispania (la Península Ibérica). De hecho se celebró un primer concilio disciplinar en la localidad de Iliberris, Granada (El Concilio de Elvira) entre los años 305–310. Se reunieron 19 obispos y 24 presbíteros. Cuentan que había treinta y siete comunidades cristianas en Hispania a finales del siglo III.
El catolicismo era considerado por los arrianos “la religión romana”, mientras el arrianismo era la “fides gothica”. Convertirse a la fe nicena significaba dejar de ser godo para convertirse en romano.
Tenemos que en la península Ibérica (Hispania) en ese momento estaba llena de arrianos, algunos cristianos romanos, algunos judíos y más comunidades más o menos establecidas. Todo muy internacional.
Hoy en día el arrianismo se sigue indicando como una herejía que pone los pelos de punta a los más fanáticos cristianos católicos romanos.
Así que empecemos a desmontar mitos, que para eso hemos venido. La península Ibérica (Hispania) del año 415, más o menos, no estaba dividida en esos dos países que hay ahora llamados España y Portugal.
Los pueblos germanos estaban que se salían allá por el siglo V.
En la Península Ibérica el Imperio Romano estuvo desde 218 a.d.n.e. hasta más o menos 476. Antes de 218 a.d.n.e. estaban los íberos, los turdetanos, los vascones, los astures, los celtíberos, y una serie de pueblos definidos en unos territorios concretos.
En ese momento consta que los griegos llamaban Íbera a la Península Ibérica. Con la llegada de los romanos se llamaba Hispania, y con la llegada de los godos se repartieron el territorio ibérico. Cuando llegaron los visigodos (que profesaban el cristianismo arriano), aliados de los romanos (que eran cristianos romanos) ambas poblaciones se mantuvieron alejadas hasta que el rey Recaredo (cristiano arriano) en el 587 se bautizó y se convirtió al cristianismo romano, así se eliminaba la barrera religiosa inicial. Godos, visigodos e hispanorromanos “se integraron”, o eso dicen.
Aún faltaba una cuestión religiosa que se solventó con el III Concilio de Toletum en 587, a partir de ahí el catolicismo se hizo oficial en la Península Ibérica. La jerarquía eclesiástica empezó a intervenir en los asuntos de estado, algo que a la industria de la religión cristiana le ha puesto muchísimo desde siempre. Independientemente del rey o mandamás de turno, ya tenían casi todo el territorio de la Península Ibérica “a nombre de la cristiandad”.
¿Qué fue de los cristianos arrianos?
Bueno, ya tenemos a la península Ibérica cristiana romana, con comunidades judías, con una capital que se llama Toletum y con una serie de intrigas cristianas, porque eso es lo que hacen los cristianos, intrigar.
Las intrigas entre los cristianos romanos y los cristianos arrianos se habían terminado. Había que buscar nuevos focos de intriga. La comunidad judía era un buen blanco.
En 589 el Concilio III de Toledo se deja claro:
- Los judíos no pueden tener esposas ni amantes cristianas.
- Prohibición de comprar esclavos cristianos y obligación de liberar a aquellos a los que se hubiese obligado a adoptar el judaísmo (aunque podían traficar con ellos).
- Se insiste en la prohibición de ocupar cargo público.
En 612 se emiten leyes persecutorias contra los judíos:
- Se ordena liberar a los cristianos (esclavos, sirvientes o colonos) de toda dependencia respeto de los judíos.
- El judío que convierta a un cristiano sufrirá pena de muerte y confiscación de sus bienes.
- Los hijos nacidos de esclavas cristianas en poder de judíos serán criados como cristianos.
- Orden de conversión forzosa de los judíos o su expulsión del territorio.
En 633 se celebró el IV Concilio de Toletum presidido por Isidoro de Sevilla (Isidorus arzobispo de Hispalis) y en presencia del rey visigodo Sisenando. A este concilio asistieron 62 obispos y se promulgaron 75 cánones.
Tanto Sisenando como Isidoro tenían arrebatos antisemitas, unas veces se mostraban a favor de los judíos y otras veces no.
Presentaban la religión judía como una bárbara superstición, no tenían inconveniente en dar a conocer sus sesgos y prejuicios como: la pereza pues no quieren trabajar cada séptimo año, el no comer cerdo, no tener una “venerable antigüedad” comparable a los pueblos de Mesopotamia, imputarles que veneran al asno, inventar leyendas negras sobre sus ritos secretos, una supuesta pretendida tendencia a la deshonra, la dureza con los deudores, la fama de “morbosos”, que las rebeliones de los años 70 y 132–135 contra el Imperio Romano fueron preparadas por ellos, la circuncisión, etc. etc., y el colofón final: “que habían matado al cristo en la cruz”. Un antisemitismo emocional que poco a poco fue dando paso a un antisemitismo legistalivo que prohibía a los judíos trabajar el domingo y cantar su propio rito fúnebre.
Pues para tener claro que la corte, que la iglesia cristiana católica romana y todos aquellos parásitos del pueblo llano que bastante tenía con comer y dormir protegido, empezaron a salir diferentes libelos en los que los judíos eran protagonistas criminales de crímenes que no se habían cometido.
Resulta que se estaba preparando un giro dramático de los acontecimientos en la Península Ibérica, algo que no contó nadie con ello. El califato de Damasco tenía planes propios y ajenos a los trapicheos de los cristianos romanos. Pero eso es otra historia.
Los libelos
Pasaron los siglos y una vez que el periodo islámico llegaba a su fin (desde el siglo VIII, año 711, hasta el siglo XV, 1492) a los cristianos romanos les volvieron a entrar las ansias antijudías. Para conseguir sus objetivos utilizaron la literatura.
Un libelo es una narrativa que tiene la función de difamación escrita. En derecho canónico es el acto con el cual se inicia el juicio. En lenguaje forense se suele usar como sinónimo de “escrito judicial” o “memorial”.
Los libelos surgieron como forma de difamar e injuriar de manera anónima, atentando contra el honor de diferentes personas y colectivos. Los libelos se fueron abriendo camino entre los géneros literarios. Son composiciones populares que entre los siglos XV y XVII se utilizaron con más frecuencia. Libelo (libellum) es “libro pequeño, la longitud del texto es breve, es conciso, es directo y a veces tiene ilustraciones satíricas para reforzar el contenido.
Como si los judíos no tuvieran suficiente carga antisemita, por el siglo XIII empezaron los rumores de que los judíos traicionaron a los visigodos (ya comenté que los visigodos eran arrianos y que el arrianismo es una herejía), y en un arrebato de patriotismo castellano impulsaron el bulo: facilitaron “la conquista islámica de la Península Ibérica”.
Qué es eso del Niño Santo de Toledo
En una época en que para los cristianos romanos una mula tenía más valor que un niño, surgió en Toletum una leyenda que llamaron “El Santo Niño de la Guardia”.
La propaganda antijudía se instauró en diferentes reinos de la geografía europea. Estaba claro que los mandamases tanto aristocráticos como eclesiásticos querían quitarse de encima a las comunidades judías. En la Península Ibérica desde que llegaron los musulmanes, los judíos tuvieron unos siglos de tranquilidad. Hasta que volvieron los cristianos a meter la mano en las cuestiones de estado.
- 1469 Isabel I, Reina de Castilla y Fernando II de Aragón y V de Castilla se casaron en Valladolid el 19/10/1469.
- 1478 Los Reyes Católicos fundaron el Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición. Fue autorizado por el papa Sixto IV.
- 1484 Tomás de Torquemada es nombrado en 1484 inquisidor general de las dos Coronas, Castilla y Aragón.
- 1488 Los Reyes Católicos obtuvieron permiso papal para nombrar al sustituto de Torquemada.
- 1488 El doctor Antonio de Ávila escribió un panfleto contra los judíos.
- 1491 Toledo está en pleno proceso de expulsión del pueblo judío. Judíos sefardíes llevaban en Toledo desde el siglo IV.
- 1491 Falso suceso del “martirio del Niño de la Guardia”, escándalo del proceso inquisitorial, posterior sentencia 16/11/1491.
El falso proceso del Niño de La Guardia
Durante el siglo XV las acusaciones de sacrilegios y crímenes rituales atribuidos a los judíos españoles son frecuentes, Segovia, Toledo, Zamora, Valladolid, Coria, Valencia. Estas acusaciones se demostraron falsas al igual que las acusaciones de Trento y de Rosenburg.
Ese “teórico” suceso del “Niño de la Guardia” no alcanzó el carácter de “crimen”. Aquella sociedad castellana estaba muy predispuesta a imputar a los judíos y a los judeoconversos los crímenes más atroces, de la misma forma que admitían como mártires a personas muy cuestionables.
Esa sentencia, por una falsa denuncia, afectó a personas de una misma familia. Grosso modo estos fueron los hechos, esto fue lo que se ha constatado.
Aquí tenemos a un protagonista de la industria de la religión cristiana que se llamaba Tomás de Torquemada y que era el inquisidor general de Castilla y Aragón.
En este proceso:
17 de diciembre de 1490, Ávila, palacio de la Abdiciencia de la Santa Inquisición, ante Pedro Villada, abad de San Marciel, León, y de San Millán, Burgos. Juan Lopes, canónigo en la iglesia de Cuenca, Ferrando de Santo Domingo, de la orden de los predicadores, se presenta una demanda contra Jucé Franco entablada por el fiscal Alonso de Guevara.
Aquí nombran el deicidio de esa persona que no se sabe si ajusticiaron en Jerusalén porque no se sabe si esa persona existió.
Aquí se encuentra el boletín de dicho juicio.
Bueno, voy al ajo.
Esta farsa de juicio tenía un propósito, adelantar la expulsión de los judíos de la Península Ibérica por parte de los Reyes Católicos.
El 31 de marzo de 1492 se firmó en Granada el decreto de la Alhambra que expulsaba a los judíos de la Corona de Aragón y la de Castilla. La Corona de Aragón y Castilla no se circunscribe a la Península Ibérica, los territorios abarcaban mucho más.
Minucias para las ansias imperialistas de unos reyes “católicos cristianos romanos” con unos deseos caprichosos de eliminar de un plumazo a un sector de la población y quedarse con sus bienes.
Ingredientes de sensacionalismo
Si Alfonso X El Sabio (1221–1284) en el cuerpo normativo redactado en Castilla durante su reinado llamado “Las siete partidas” (dicen que es el código más completo de la ley civil de la Edad Media) ya decía esto sobre los judíos.
La escalada en la Península Ibérica era esperable. Parece que la serie de libelos de sangre culminó en 1491 con el caso “El Santo Niño de la Guardia”, un crimen judicial a la altura del “Santo Oficio” castellano. Nada mejor que una historia sangrienta con un niño de protagonista para que las propiedades de los judíos pasaran a manos de los cristianos.
Y como he dicho “culminó”. José María Perceval nos contó en 1993 cómo se iniciaron las acusaciones a los judíos de crímenes horrendos, sí, al más puro estilo “hombre del saco”, fue algo que parecía estratégico para conseguir los objetivos de los llamados cristianos. Estos cristianos supersticiosos que consideraban que los judíos podían contaminar “de/con cosas” a los cristianos (algo que aún perdura) así que los de la jerarquía eclesiástica cristiana mostraban “preocupación por la salud espiritual de los bautizados”.
Antonia de Oñate nos comentó cómo la pseudohistoria y los bulos han estado presente acompañando al humano. Y sí, las teorías de la conspiración matan.
El libelo de sangre antisemita llamado “El santo Niño de la Guardia” sigue usándose. En La Guardia, Toledo, las fiestas patronales se cerebral del 23 al 28 de septiembre, se rememora uno de los capítulos más horribles de la historia de la Corona de Castilla y de Aragón, una historia de intolerancia y fanatismo cristiano que acusa al pueblo judío de secuestrar, asesinar a niños cristianos con el fin de utilizar su cuerpo, su corazón y su sangre para supuestos rituales macabros.
La Guardia celebra el 25 de septiembre la festividad del que desde hace siglos es su Patrón. Reyes, devotos, peregrinos, enfermos y miles de personas desde hace más de cinco siglos han visitado y siguen visitando el santuario del Niño de La Guardia, donde se gestó una tradición y devoción (falsa) que supuso un antes y un después en la historia de la presencia judía en la corona de Castilla.
Que se celebre que ejecutaron a dos judíos y seis conversos en el Brasero de la Dehesa de Ávila porque fue la consecuencia de un proceso lleno de irregularidades no creo que sea para celebrar. Amañaron una confesión entre un cristiano que se hizo pasar por leví, y sacó una confesión a un hombre exhausto y dijo lo indecible. Así comienza el relato de una de las estrategia cristiana para conseguir sus objetivos políticos. Nunca se supo el nombre del niño, nunca hubo cadáver, supuestamente los hechos ocurrieron en La Guardia, Toledo, los reos fueron trasladados a Ávila, las declaraciones y confesiones están llenas de incoherencias y contradicciones. Todo un despropósito jurídico para conseguir objetivos políticos.
Por aquí dejé un texto de otro caso antijudío que fue motivo de los discursos de odio antisemita de principios del siglo XX.
Tras la completa expulsión de los judíos en 1492 la curia eclesiástica del momento se hizo con las propiedades de los judíos y ahí estuvieron haciendo lo que quisieron.
Con los que ejecutaron por el caso “El Santo Niño de la Guardia” hicieron pelotazos inmobiliarios a favor de los cristianos.
El antisemitismo sigue
Y como no, también tenemos el libelo más actual llamado “Los protocolos de los sabios de Sion” es la publicación antisemita más famosa y ampliamente distribuida a comienzos del siglo XX.
Este alegato antisemita falsificado publicado por primera vez en 1902, cuyo objetivo era justificar ideológicamente los pogromos que sufrían los judíos en la Rusia zarista. Este bulo literario cada vez regresa con más vehemencia.
Este libelo fue publicado por entregas en el diario ruso Znamya (La Bandera). Lo que nos ha llegado hasta hoy fue una publicación de 1905 en Rusia como apéndice al libro “El Grande en el Pequeño: El advenimiento del Anticristo y el Dominio de Satán en la Tierra” del escritor ruso Sergei Nilus. Ya estaban los cristianos tocando las narices de nuevo.
Pues parece que el tal Sergei Nilus encima es “místico” creyente cristiano ortodoxo.
La monarquía rusa había dado muestras por 1000 años que era “un poco absolutista”. Nicolás II no veía los cambios sociales que se estaban produciendo ni las demandas de los campesinos. Estos cambios fueron impulsados por los “soviets” que eran los consejos municipales que organizaban a los trabajadores. Los movimientos obreros en toda Rusia, no olvidar que Rusia es muy, muy grande, iban consiguiendo alguna que otra victoria social. Los zaristas lo tenían muy claro, no querían soltar poder alguno. Si había que recurrir a libelos para poner unos enemigos como objetivos pues se hacía. Total, no era la primera vez que a los judíos se les culpaba de “cosas”.
En Rusia había, más o menos, casi un millón de judios en 1821. En 1791 entró en vigor el Decreto de Asentamiento que fijaba para la población de origen judío la llamada Zona de Residencia. El asesinato por atentado de Alejandro II en 1881 desató de manera desmedida una oleada de antisemitismo.
De los seis terroristas que fueron condenados a muerte por el atentado, solo una era judía. Se llamaba Guesia Gelfman.
En 1891 Alejandro III (1845–1894) ordenó la expulsión de Moscú de veinte mil judíos.
La campaña de intoxicación antisemita alcanzó uno de sus puntos culminantes con la publicación de Los Protocolos de los Sabios de Sión, en 1902. Se trataba de un libelo fabricado por la policía zarista y jóvenes militares que dio carta de naturaleza al mito de la existencia de una conspiración judía de alcance mundial para someter a las naciones cristianas. Las intrigas cristianas acaban adquiriendo propiedades judías.
https://addi.ehu.es/bitstream/handle/10810/43402/TFG_Mato.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Luego lo que pasó es otra historia bélica que trajo cambios bruscos sociales y políticos en el planeta Tierra.
Y ahora qué
El concepto de fake news alude a noticias falsas que se ponen en circulación con fines maliciosos. Las fake news son los libelos de antaño. También ha cambiado la forma de esparcir esos bulos que incriminan a otras personas o colectivos en asuntos turbios y delictivos. Ahora con las Nuevas Tecnologías de la Información nos encontramos con algunos modelos de difamación novedosos.
Nos encontramos con delitos “nuevos” como: “Enaltecimiento de odio y terrorismo por medio de las Redes Sociales” (que es lo que nos atañe en este texto dedicado a libelos de sangre a lo largo de la historia).
En este “delito” nos encontramos con un enfrentamiento de ideas fundamentales: el derecho a la libertad de expresión y el derecho a la libertad ideológica. Tenemos ejemplos como:
2016
2018
2020
Diversas sentencias en los últimos años nos ponen en contexto de qué va esto de “soltar las barbaridades que se le ocurra a la gente en las redes sociales”. Hay algunos “enaltecimientos” que sí están perseguidos por ley por enaltecimiento del terrorismo o por odio. No todo está contemplado por la ley y algunas veces no es más que “libertad de expresión”.
Hasta aquí un repaso por encima de lo que fueron los libelos de sangre, un poquito de contexto histórico y unas sentencias actuales sobre lo que se denomina “delito de odio” y como se mueven las libertades y derechos y sus fronteras en los medios de comunicación actuales, las redes sociales, foros de internet y demás medios de difusión tanto de información como de bulos.
El ancho campo de las teorías de la conspiración
Ya hablé por aquí de que las teorías de la conspiración matan.
https://matimatarredona.medium.com/las-teorías-de-la-conspiración-matan-682ce3418141
Por las redes concurren una serie de teorías de la conspiración que siguen poniendo a los judíos como protagonistas de planes para dominar el mundo. Sea lo que sea se acaba diciendo que “hay un contubernio judeo-masónico que quiere… cosas”. Aquí unos cuantos ejemplos.
Plan Kalergi
En 2007 se detuvo en Benalmádena, Málaga, al líder neonazi Gerd Honsik condenado en Austria por negar el Holocausto y la existencia de las cámaras de gas. La detención se produjo en virtud de una Orden Europea de Detención y Entrega. Honsik fue condenado en 1992 por un tribunal de Viena a un año y seis meses de prisión, que no llegó a cumplir al haber huido a España (como no, España, refugio de nazis desde que la dictadura de Franco se mostró amiga del nazismo), por haber afirmado reiteradamente que el régimen nacionalsocialista alemán no usó cámaras de gas contra los judíos. Escribió, entre otros, el libro “¿Exoneración para Hitler?”. Vivió 15 años en España, propagó ideas neonazis a través de internet. Tras su detención en Málaga en 2007 fue extraditado a Austria. En 2009 tuvo el juicio en Austria, Honsik negó sus cargos en base a “la libertad de expresión” mientras se le acusa de incitación al odio. También escribió el libro incitador del bulo “Plan Kalergi” se titula: ADIÓS EUROPA EL PLAN KALERGI Y EL FIN DE EUROPA ¿Un racismo legal?
Esta conspiración se basa en la idea de un genocidio de la población blanca mediante el mestizaje y la inmigración masiva de “no blancos” a Europa. Se habla de 28 tesis que indican “cómo se está acabando con nuestros pueblos blancos”. Como no, esto que “revela” Honsik en este libro es “un secreto”, las teorías de las conspiración son secretos que están en boca de todos los que quieren oír.
En fin, Honsik siguió con sus ocurrencias de que los judíos se apropian de todo.
No pongo el enlace porque no me da la gana, está en la red, pongan el nombre en el navegador y saldrá.
El Gran Reemplazo
Parecida al Plan Kalergi, la teoría de la conspiración del Gran REemplazo se inició en Francia con la ocurrencia de que los franceses blancos católicos y la población blanca cristiana europea en general está siendo sistemáticamente reemplazada con pueblos no europeos, específicamente árabes, bereberes. La imagen del «gran reemplazo», difundida por el escritor francés Renaud Camus, inspira al supremacismo blanco. Alegar que las olas migratorias aspiran a terminar con la civilización blanca, me da que es mucho asumir.
Renaud Camus es un escritor, ensayista y poeta francés nacido el 10 de agosto de 1946. Es conocido por su obra literaria y sus ensayos, considerado una figura influyente en el ámbito de la literatura y la cultura francesa contemporánea. Algunos de sus temas recurrentes incluyen la identidad, la migración, la política y la cultura. El nacionalismo étnico francés es el origen de esta teoría de la conspiración, el libro “El gran reemplazo” que primero fue un discurso y luego un libro. El libro ayudó a impulsar el lanzamiento de una red transeuropea de extrema derecha con conexiones con extremistas en Estados Unidos.
En 2017, durante la manifestación masiva de supremacistas blancos denominada “Unite the right rally” en Charlottesville, Virginia, se coreó un lema con resonancias de Camus: “Los judíos no nos reemplazarán”.
Esta teoría sirvió de inspiración para la acción terrorista de Brenton Tarrant, el ciudadano australiano que llevó a cabo los ataques contra la comunidad musulmana en Christchurch, Nueva Zelanda en 2019, se identificaba con esta teoría conspirativa y nombró su manifiesto en línea con dicho término.
Payton S. Gendron, un joven estadounidense de 18 años arrestado como el autor del tiroteo en Búfalo en 2022, en el que murieron diez personas, la mayoría de ellas afroestadounidenses, se autodenominaba supremacista blanco, fascista y antisemita, y había expresado en internet sus motivaciones racistas, además de seguir esta misma teoría conspirativa.
Patrick Crusius hizo un atentado en Texas donde mató a 23 personas (entre ellas ciudadanos mexicanos) en un ataque racista. Atacó a personas que fueron a comprar al centro comercial Cielo Vista Walmart. Antes del tiroteo, Crusius publicó un manifiesto anti-migrante en un blog de internet.
En mayo de 2019, Renaud Camus se postuló como candidato al Parlamento Europeo.
BlackGoo
Esta teoría de la conspiración es muy graciosa. Resulta que los acólitos de esta teoría de la conspiración apocalíptica pregonan que un líquido negro viscoso entra en el cuerpo humano, como los parásitos, y hace “cosas”.
Es graciosa porque esta teoría de la conspiración se ha ido haciendo grande a golpe de diversas películas y diferentes series televisivas. No se ponen muy de haciendo en qué es exactamente esa sustancia viscosa negra. Eso sí, cualquier cosa que tiene color negro y es viscoso, lo dan como blackgoo.
También dicen que esa sustancia viscosa y negra está hecha con grafeno.
Pero esto no es extraño, tiene explicaciones muy sencillas.
Y es que es lo que pasa, tenemos explicaciones sencillas, que científicamente tienen una considerable complejidad, y unos cuantos están enriqueciendo unos bulos y los miedos supersticiosos de muchas personas porque han visto en películas y series unas fantasías que forman parte de la literatura, a veces esa literatura es de la peor, pero eso no importa.
Tienen explicaciones, de fenómenos claramente estudiados, con orígenes inciertos y mezclados. La cosa esa negra y viscosa dicen que viene del propio planeta Tierra, otras veces viene de fuera del planeta y otras viene por las vacunas.
No se ponen de acuerdo, cada conspiranóico va por libre en estas cuestiones. Sí que hay un “algo” en común porque pregonan que el blackgoo lleva a la modificación a humano zombie y se quedan tan conspiranóicos.
¿Qué nexos ponen con la realidad? Son muy variados los nexos, aquí vemos cómo alegan que hay medicamentos que tienen eso negro y que está imantado.
La piedra negra de la Kaaba también tiene trazas de blackgoo, según estos teóricos de la conspiración haciendo uso de su libertad de expresión.
Había que poner una enfermedad para que todas estas ocurrencias tengan un esquema organizativo, a ver, que ser teórico de la conspiración no está reñido con ser ordenado en los distintos discursos fantasiosos e imaginativos. Qué mejor que utilizar una presunta enfermedad llamada “de Morgellons” que es una supuesta afección que se caracteriza por la creencia de que salen parásitos o fibras de la piel. Es una condición en la que la persona que lo sufre tiene la sensación de estar infectado por pequeños insectos o parásitos como ácaros, piojos, pulgas, etc.
Así que tenemos gente que está intentando colar unos bulos y unas teorías de la conspiración que pueden desencadenar en cuestiones severas. Existen casos de delirios parasitario y el propio paciente se lesiona para intentar quitarse los parásitos que no están. Son escasos estos casos, pero cuando se dan causan muchísimo sufrimiento.
Pero los y las teóricos de la conspiración tienen planes propios, hacer vídeos y propagarlos en redes sociales como Telegram y WhatsApp diciendo que “el bicho militar” hace cosas, es algo que se acompaña con imágenes borrosas y de mala calidad, eso son las cosas del directo.
Poner voz de misterio misterioso da caché.
Los teóricos de la conspiración tienen un batiburrillo de diferentes bulos que van engrandeciendo, juntan las vacunas (que dicen que están consagradas para la acción del demonio, tecnologías híbridas de formas de vida no naturales que son puertas para la acción del demonio) con la física cuántica poniendo al sistema nervioso central, para… trata de dominar al ser humano.
La publicidad también es una buena diana para los teóricos de la conspiración que andan al acecho de las novedades. La creatividad puede ser motivo de justificaciones de las más diversas y dicharacheras ocurrencias discursivas de estos mesías de pacotilla ávidos por pregonar que son los mejores mesías que pueda haber en el planeta. Lady Gaga es un buen ejemplo. Su promoción de su perfume tiene un efecto streisand maravilloso. Han multiplicado por 10 las ventas del perfume “Fame” de color negro, al ser vaporizado se vuelve transparente, la imagen de la artista es preciosa.
En estos menesteres no pueden faltar los niños.
Sí, toda esta calaña de teóricos de la conspiración está muy preocupados por la Infancia. La cuestión “del hombre del saco” lleva con la humanidad milenios. En todas las zonas geográficas del planeta hay un cuento que básicamente es la narración de cómo “alguien rapta y se lleva a un niño, a una niña”, y sí, hasta en las canciones hay de eso. Ahora el hombre del saco ha mutado a… según la moda del momento debido a la película o serie de TV que haya pegado el pelotazo.
Antivacunas
Una de las más dañina y fatales es esta teoría de la conspiración que achaca a las vacunas barbaridades que van desde que provocan autismo, que entre sus ingredientes hay grafeno, chips, o incluso dicen que hay niños abortados. La parafernalia discursiva es muy amplia.
Por aquí escribí sobre eso. Los antivacunas hacen mucho daño, con consecuencias fatales. Se ceba con la infancia, la irracionalidad de las supersticiones hace nido en las asociaciones sinápticas de padres y madres que pensando que “hacen lo mejor para sus hijos”, los están dejando a merced de la enfermedad.
La pseudociencia juega con la vulnerabilidad humana, la necesidad y la desesperación de las personas. Los charlatanes pseudocientíficos hacen caja exponiendo proselitismos más o menos delictivos de productos, servicios, sustancias y demás formas de vender utilizando conceptos científicos que nada tienen que ver con su definición y uso académico.
Mezclar las teorías de la conspiración tiene un fervor multitudinario. Las teorías de la conspiración son ideas irracionales que suponen que nada ocurre por casualidad, que nada es como parece, y que todo está conectado. Sostienen que un grupo de agentes malignos, los conspiradores, está orquestando secretamente todo lo que ocurre en la sociedad, en la cultura y en los ambientes científicos, empresariales, políticos y sanitarios. Normalmente los teóricos de la conspiración presentan a los supuestos conspiradores como enemigos del pueblo. Los líderes que propagan teorías de la conspiración se consideran “defensores de la verdad” porque ellos son “buscadores de la verdad”.
Cuando empezaron las vacunas contra la covid-19 a dar muestras de eficacia, los foros de las redes sociales empezaron a llenarse de diferentes grupos que empezaron a lanzar bulos, desinformaciones y difamaciones. Los foros en las redes sociales se llenaron de mensajes en los que decían que: “las vacunas contra la covid-19 producían cambios en el ADN, producían infertilidad, entre sus ingredientes se encontraba el grafeno, la gente se quedaba imantada cuando le ponían la vacuna, en la vacuna se encontraban nanorouters que se activaban con la tecnología 5g”. A todo esto se le ha unido el blackgoo. Y como no, el plan secreto que hay detrás de todos esto porque unos hombres malos, malos quieren cosas.
la figura del iluminado o elegido o portavoz paranoide, el intérprete de signos o indicios, que se comporta como un oráculo; y la otra figura será la del renegado o el agente doble, que permite informar desde dentro de la conspiración de los agentes conspiradores y sus movimientos.
Las teorías de la conspiración nos muestran el lenguaje pedante y rimbombante del portavoz/líder/emprendedor/a una burda engañifa, timo, estafa en la venta de algún producto, servicio, pseudoterapia, etc. La argumentación conspiranóica, repleta de sesgos y falacias primero con el sesgo de confirmación(tendencia a favorecer, buscar, interpretar y recordar la información que confirma las propias creencias), luego la «inversión de la carga de la prueba» (alegan que no tienen la obligación de probar los hechos y circunstancias que causan los efectos que pregonan como que las vacunas causan autismo), después las falacias Post hoc ergo propter hoc (si un acontecimiento sucede después de otro, entonces el segundo es consecuencia del primero) y Cui Protest (¿a quién beneficia?).
Conclusión
Refutar las teorías de la conspiración es extremadamente difícil, y a veces se consigue el efecto contrario, es decir, aumentar los sentimientos de apego hacia la teoría de la conspiración por parte de los adeptos. Leon Festinger ya explicó el fenómeno de la disonancia cognitiva en 1950
Las teorías de la conspiración pueden aumentar directamente los sentimientos negativos de impotencia, desilusión, incertidumbre, desconfianza y anomia. También disminuye la confianza del individuo en el gobierno y la participación política como el voto. Puede interferir en las relaciones inter- grupales mediante la agitación de los prejuicios y la discriminación. A veces alimenta la violencia hacia los demás; lleva a las personas a desconectarse de las normas sociales y avanzar hacia la radicalización; y como hemos visto en esta pandemia que nos ha tocado vivir, durante una emergencia de salud pública producen negación de la ciencia, distorsiona las decisiones médicas, y exacerban las crisis de salud pública.
La difusión de información falsa en cuestiones de la vacuna es preocupante porque puede retrasar la inmunización e incluso puede reducir las tasas de vacunación de las vacunas del calendario vacunacional de la infancia. No estamos hablando de personas que tienen dudas legítimas sobre las vacunas o cualquier otro tipo de fármaco o tratamiento, resolver dudas, no es el problema. El problema está en que los pacientes que van a buscar información a Internet, a las redes sociales, encuentran de primera búsqueda las webs, las páginas y los foros que son los bulos, las mentiras y las desinformaciones. Whatsapp, Telegram, los medios de comunicación y Facebook son los son los principales canales a través de los cuales estos bulos llegan a los pacientes.
Las teorías de la conspiración emergen para intoxicar la opinión pública, son informaciones maliciosas con objetivos sociales, políticos, económicos y/o sexuales. Están planificadas, tienen líderes, tienen fuentes de autoridad, financiación y recursos. A los líderes no les preocupa utilizar la deshonestidad para difundir estas teorías de la conspiración, y tienen millones de adeptos. Ya lo vimos con el “Santo Niño de la Guardia” que los autores no dudaros en usar artimañas hasta conseguir sus objetivos. No ha cambiado mucho el tema en estas cuestiones.
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