Las religiones de paz

23 min readAug 16, 2022

El ataque a Salman Rushdie el pasado viernes 12/08/2022 en la Institución Chautauqua, en el noroeste del estado de Nueva York es la no culminación, por que no mató a Salman Rushdie, de una cosa/movida/fatua/loquesea que empezó en 1989.

Salman Rushdie nació el 19 de junio de 1947 en Bombay, India británica. Tiene nacionalidad británica y estadounidense. Estudió en la facultad de Historia de Cambridge. Escribió “Hijos de la medianoche” en 1981, una alegoría de la India moderna con la que ganó el Premio Booker. “Vergüenza” en 1983. “La sonrisa del jaguar’’ en 1987, una crónica de sus viajes por Nicaragua, y en 1990 escribió un libro para niños titulado “Harún y el mar de las historias”.

En 1988 publicó “Los Versos Satánicos”, una novela muy bien recibida en la que la fantasía se combina con la reflexión filosófica y el sentido del humor, desencadenó una tormenta. La obra despertó las iras de los musulmanes shiíes (chiíes), quienes la consideraron un insulto al Corán, a Mahoma y a la fe islámica. A los cristianos también les entró las ansias de las blasfemias y las herejías con esta novela.

Así que ya tenemos la gozadera del fanatismo religioso desde 1989

Un poco de contexto

Mahoma: Fue un ser que montó una nueva industria religiosa en la península arábiga en el siglo VII.

Corán: Es el libro “eterno y divino” que fue presuntamente revelado a Mahoma. Compuesto por 114 suras (o azoras), dividido en aleyas (versículos). Es el libro fundamental de la religión musulmana, supuestamente contiene las revelaciones que dios hizo a Mahoma a través del ángel Gabriel. Se le considera la “sagrada escritura del islam, que muestra el verdadero camino de la salvación”. La palabra corán es traducida como “recitación”.

Hadit/hadiz/hadith/hadices: Tras la muerte de Mahoma, su vida, y sus palabras comenzaron a ser recopiladas, siendo consideradas un ejemplo para toda la comunidad. Estos dichos y hechos de Mahoma, conocidos como sunna, fueron compilados en una serie de relatos llamados hadiz, siendo a partir de entonces una guía para la interpretación del corán, utilizado por los ulema o eruditos religiosos.

Islam: Religión monoteísta que tuvo su origen en las enseñanzas de Mahoma (Abū l-Qāsim Muḥammad ibn ‘Abd Allāh ibn ‘Abd al-Muṭṭalib ibn Hāšim al-Qurayšī, 570–632) en Arabia, las cuales están recogidas en el Corán. Su dios es Alá, su profeta Mahoma y el Corán es su libro sagrado. Como no, el islam fue revelado directamente por Alá a Mahoma a través del ángel Gabriel.

Los cinco pilares fundamentales de esta religión/filosofía/estilo de vida/sumisión completa a dios son:

Shahada: la profesión de fe: Adorar a Alá como dios único y creador, y en Mahoma como su profeta.
Salat: la oración ritual: cinco veces al día en dirección a la Meca y el viernes en la mezquita.
Ramadán: el ayuno desde la salida hasta la puesta del Sol: Se deberá de sostener durante 29 días para conmemorar el mes del Ramadán durante el cual fueron “reveladas las verdades del Corán a Mahoma”.
Hajj: la peregrinación a La Meca por lo menos una vez en la vida
Zakat: la limosna: Esta ofrenda es importante e imprescindible para ser un buen musulmán.
Esta es de postre: la creencia en los ángeles: son criaturas de luz para cumplir algunas misiones como intermediación entre el Dios y las personas. No se pueden ver con sus formas reales, no se oyen ni se sienten por sentimientos. Su misión es la oración a Dios.

Origen del islam

La Península Arábiga es una extensión de casi 3 millones de km2 de territorio fundamentalmente desértico con algunas partes fértiles, antes de la aparición del islam estas partes fértiles eran disputadas por las entonces potencias del momento. Al norte, dos imperios y dos religiones, el Imperio Sasánida (zoroastriano) y el Bizantino (cristiano), pugnaban por hacerse con el control de una feraz zona con recursos hídricos y por donde pasaban las antiguas rutas caravaneras comerciales. Al este, el Imperio Sasánida había ocupado zonas de lo que hoy es Omán y al sur, el reino del Yemen, lugar montañoso con fértiles áreas agrícolas, mantenía relaciones comerciales con el de Aksum, en Etiopía y comercializaba con el Índico.

El centro de Arabia estaba poblado por tribus beduinas politeístas y nómadas dedicadas al pastoreo y a guiar caravanas. También hubo pequeñas ciudades como Sanaá, Taif, Yathrib (la futura Medina) y La Meca (centro religioso donde se hallaban la fuente Zamzam y La Kaaba), pobladas por algunas tribus politeístas ya sedentarizadas junto a bolsas de población autóctona de origen cristiano y judío.

Los árabes se consideran semitas, es decir, remontan su ascendencia hasta Abraham y a Adán. Se dicen descendientes de Ismail, el hijo de Abraham y Agar, la esclava egipcia de Sara, la mujer de Abraham.

Todas estas tribus hablaban el árabe como lengua vehicular y estaban unidas por alianzas de consanguineidad mediante matrimonios y alianzas entre clanes lo que permitió desarrollar un principio de solidaridad tribal llamado “asabiya” que daba la cohesión y la protección a sus miembros frente a terceros, lo que implicaba también que muchas tribus estuviesen en guerra entre ellas.

Mahoma nació en 670/675 en La Meca y creció en el clan Banu Hashim en la tribu Quraysh, los Quraysh eran una poderosa tribu de comerciantes de la Península Arábiga en el siglo VII. Esta tribu controlaba La Meca, donde eran custodios de la Kaaba, el sagrado santuario pagano y destino de los peregrinos que se convirtió en el santuario más sagrado del Islam.

Mahoma es considerado profeta, jefe guerrero y político. A golpe de sable unificó las tribus de Arabia e impuso su religión monoteísta. A los mandamases no les gusta eso de muchos dioses, prefieren uno y controladito. (Recuerdo esa protocristiandad cuando hicieron lo posible para quitar los dioses romanos y poner ese dios uno y trino).

Como decía, la familia de Mahoma controlaba La Kaaba, una construcción pre-islámica, era un edificio sagrado sin advocación concreta, albergaba a la infinidad de deidades que las tribus árabes adoraban.

Cuenta la leyenda que en 605, la Kaaba necesitaba ser reparada y un número de jefes tribales se disputaron sobre quién tendría el honor de colocar nuevamente la piedra sagrada en el interior de la Kaaba. Mohama, un miembro prominente de la poderosa tribu Quraysh propuso una solución equitativa: se debería colocar la piedra sobre una alfombra, y cada uno de los cuatro jefes tribales tomaría un rincón de la alfombra para llevarla. Los jefes les gustaba la solución de Mahoma tanto que le dieron a Mahoma el último honor de levantar la piedra de la alfombra una vez dentro de la Kaaba. El carisma de Mahoma ya estaba mostrándose y su influencia estaba creciendo.

Me pregunto si este es el origen de las alfombras voladoras que tanto gozo ha puesto en la novela “Las mil noches y una noche”

La Piedra Negra de la Kaaba (Hayyar al Asuad).

En 2021 dicen que hicieron una fotografía de alta resolución de la “piedra negra de la Kaaba”. Primer plano de piedra negra con resolución de alta calidad.

https://www.instagram.com/p/COc1uQiD-Hc/?utm_source=ig_embed&ig_rid=bebeb15e-ae0b-4318-9a32-a7fe2bd44dcd

Hay dos versiones del origen de esta piedra, que es un meteorito y que es de origen volcánico. Es igual el origen, es una reliquia y no cuentan los hechos y la realidad, cuentan las leyendas que se han transmitido a través de las generaciones otorgando propiedades divinas supersticiosas preislámicas.

La piedra es de unos 30 cm de diámetro y 1,5 metros por encima del suelo. La piedra se rompió en varios pedazos debido al calor provocado durante un incendio en el año 683. La Kaaba era venerada incluso por aquellos protocristianos y judíos que vivían en aquellos lares.

Se cuenta que Mahoma se casó con 25 años con su jefa Jadiya (40 años), esta mujer fue muy poderosa, era comerciante, las caravanas que pasaban por La Meca que transportaban productos por las grandes ciudades del Medio Oriente, al sur de Yemen y al norte de Siria, eran controladas por esta mujer. Jadiya pertenecía al mismo clan/tribu que Mahoma, los Quraysh.

Años más tarde, Mahoma empezó a tener “revelaciones” en las cuales dios le reveló el corán a Mahora por medio del ángel Gabriel, sí, el mismo que le dijo a María que estaba embarazada de dios. Jadiya es considerada la primera conversa musulmana de la historia, Mahoma le contaba “sus revelaciones” y supuestamente ella creyó y aceptó el mensaje, esto le dio confianza a Mahoma y empezó a considerar que “tenía una voz de dios”

*Mahoma recibe las revelaciones de Gabriel. Manuscrito persa. Siglo XV.*

Ya tenemos la revelación divina por medio del ángel Gabriel, que parece ser que es lo más en cuestión de ángeles. Es el arcángel mensajero de dios, además imparte la habilidad para la comunicación, claridad para transmitir conceptos y también cuestiones de anunciar el positivo en la prueba de la rana con María. Pues parece ser que a Mahoma le pasó lo mismo que a Moises cuando Gabriel le dio las tablas. En este caso Gabriel tiró la casa por la ventana y nada más y nada menos le dictó un libro a Mahoma, toma ya. Claro, esto no sucedió del tirón, no, pasaron unos pocos años hasta que se le dio forma al corán. En el monte Hira hay una cueva que parece ser es donde se encontraba Mahoma con el Gabriel. Parece ser que Gabriel le daba soluciones por las preocupaciones que tenía Mahoma sobre la situación de la Meca, vamos, lo de siempre, las injusticias sociales y el egoísmo de los ambiciosos y grandes mercaderes.

La aparición del arcángel Gabriel ante Mahoma en el monte Hira

Así que ahí estaba Mahoma “reflexionando” sobre estas cuestiones trascendentales y se le apareció el Gabriel para poner en orden sus pensamientos y alentar a declarar hereje a todo aquél que osara toserle.

“Hay un solo Dios, Alá. Adorar a otros es una blasfemia” (de qué nos sonará eso)

En 613 Mahoma comenzó a declarar abiertamente que estaba recibiendo mensajes de Dios, y que él era un profeta en la misma línea de los profetas como Jesús y Moisés. Mahoma declaró que los tradicionales dioses paganos de los árabes eran falsos y que la Kaaba se debería convertir en un santuario para el culto exclusivo del Dios Judeo-cristiano (sorpresa, conocido en árabe como Alá). Mientras que el número de seguidores de Mahoma iba creciendo, Mahoma se convirtió en una amenaza para los líderes tribales cuya riqueza se basaba en la Kaaba. La denuncia de la religión tradicional era especialmente ofensiva a su propia tribu: los Quraysh porque fueron los guardianes de la Kaaba y la más destacada de todas las tribus de la Meca.

Cuando Mahoma enseñó la nueva religión del Islam monoteísta no quiso destruir la Kaaba ni hacer ningún proselitismo en contra de algo tan antiguo y con tantas raíces entre el pueblo sino que elaboró una leyenda que evitó las posibles tensiones (si es que no hay nada mejor que una buena leyenda inventada para vender una religión).

Mahoma en 622 emigró con algunos de sus seguidores desde la Meca a la población de Yahrîb (desde entonces denominada Medina), a esta emigración se le ha llamado Hégira (huida). En ese momento empezó el calendario islámico. Mahoma se fue a Medina porque su clan Bani Hashim fue expulsado de la ciudad y se quedó sin apoyos. En Medina da forma a su política: los seguidores del Islam estarían unidos por la fe, y este vínculo sería más importante que el tribal. Esto no era una novedad entre cristianos y judíos, pero sí entre los árabes. En Medina se construyó la primera mezquita Quba, construida en 622 y planificada por el mismo Mahoma. El Imam de esta mezquita fue Salim Maula (esclavo liberto de) Abu Hudhaifah (sucesor de Mahoma, primer califa del Islam).

La Yihad, o Guerra Santa se promovió contra los cultos preislámicos árabes.

En el año 625, Mahoma retornó a La Meca, tomándola con 10 000 guerreros, y retiró del templo los ídolos tras honrar la “Piedra Negra”.

Mahoma desarrolló una sencilla estrategia para derrotar a los quraysíes de la Meca. Pactó con otras tribus su alianza o su neutralidad, y comenzó la guerra atacando las caravanas que iban a La Meca, destruyendo el prestigio de los quraysíes que estaban a cargo de la seguridad de La Meca.

Las madres de los creyentes

Las esposas de Mahoma tienen el rango de “madres de los creyentes”, dicen que tuvo hasta 11–12–13 esposas, no se ponen de acuerdo entre las diferentes fuentes, en fin.

Cuenta la leyenda que Allah se refiere a las esposas del Profeta Muhammad en el Corán y las llama “Madres de los creyentes”: “El Profeta es más amado para los creyentes que ellos mismos; las esposas del Profeta [deben ser respetadas como si fueran] sus madres…” (Corán 33:6).

Y luego tenemos el cachondeo de lo que dicen unos y lo que dicen otros, total, que unos dicen que tuvo 11 mujeres:

Jadiya Bint Juáilid (556–619)
Sauda Bint Zam’a (desconocido — 674)
Aisha Bint Abu Bakr (612–678)
Hafsa Bint Omar Ibn Al Jattab (605–665)
Zaynab bint Juzaymah (595–624)
Umm Salamah bint Abu Umayyah (596–680)
Juwayriyah bint al-Haariz (608–673)
Zaynab bint Jahsh (590–641)
Umm Habibah bint Abu Sufyan (589–666)
Safiyyah bint Huyayy ibn Ajtab (610–670)
Maymunah bint al-Haariz (594–674)

Según la fuente que se consulte Jadiya es “la mejor mujer del universo”, o “Aisha es la mejor mujer del universo”. Eso sí, afirman con mucha vehemencia que fue Mahoma quién dio “estatus de madre” a las mujeres por aquellos lares.

Estas joyas de mujeres de Mahoma estaban tocadas por el aura de no ser celosas, daban y daban pues tenían el corazón comprensivo, y complacían a Mahoma en todos sus caprichos y deseos, qué cosas.

Dicen que Mahoma tuvo 7 hijos, cuatro hijas y tres hijos. Según las fuentes puede que tengan más, en fin, esto de que sea tan incierto da cuenta de que las leyendas crecen alrededor de este personaje.

Mahoma falleció en 632, ese año La Meca sufre la destrucción de los ídolos y símbolos de divinidades paganas en la Kaaba. Tras su muerte empieza una serie de luchas internas por el poder que llegan hasta hoy.

Un cisma

La división entre sunitas y chiitas se remonta al año 632, muerte de Mahoma, que derivó en una pugna por el derecho a liderar a los musulmanes que, en cierta forma, continúa hasta el día de hoy. La sucesión de Mahoma no es más que una cuestión de herencias no resuelta y ha causado millones de muertos.

Los sunitas son mayoría entre los musulmanes –se estima que entre el 86% y el 90% pertenecen a esta corriente– y se ven a ellos mismos como la rama más tradicional y ortodoxa del Islam. Los sunitas veneran a todos los profetas mencionados en el Corán, pero particularmente a Mahoma, quien es considerado el profeta definitivo.

Los chiitas son partidarios de Ali (Abu al-Hasan Ali ibn Abi Tálib, 599/600–661), el primo y yerno de Mahoma, estaba casado con la hija de Mahoma llamada Fátima. Este “ser” es objeto de especial veneración se enfrentó a Aisha, hubo una especie de acuerdo y lo dejaron a su aire en la zona de Irak y Persia.

Los jariyitas fueron una escisión de los chiitas, y uno de ellos asesinó a Ali, en fin.

Los sunitas consideran a Ali el cuarto califa bien guiado. Para los chiitas es el primer imán y es considerado legítimo sucesor de Mahoma.

Como se ve la industria de la religión tiene unos culebrones intrínsecos a sus inicios y desarrollos dan cuenta de que son cosas muy humanas, hechas por humanos y desarrolladas por humanos.

Según se consulte las fuentes sunitas o las fuentes chiitas los mensajes varían. La cuestión es que de Siria a Líbano la hostilidad entre los musulmanes suníes (80% del islam) y los chiíes (menos del 10%) va de guerra en guerra desde 632. Quién debería ser el sucesor de Mahoma levantó pasiones, y como no, ansias de poder.

Los seguidores de Mahoma empezaron a cuestionar quién debería ser el sucesor para el Gobierno del califato islámico. Algunos creían que este sucesor debería ser designado por gracia divina y que un parentesco familiar con Mahoma era una señal para elegir a esa persona como futuro líder. Bajo este concepto, se creía que el mejor sucesor para el califato era un primo o yerno de Mahoma, Ali. Inmediatamente, surgió un grupo de oposición, que defendía que el nuevo líder debía ser elegido por la mayoría de miembros de la comunidad musulmana. Quienes argumentaban esto último se basaron en extractos de la “Sunna”, un libro que contiene las palabras del profeta y sus seguidores. Es por esto que a este bando se lo denominó como los “sunitas” y su oposición se la conoce como “chiitas”.

El tema es que la herencia de Mahoma estaba en disputa, como en toda lucha política por el poder. Por un lado Abu Bakr, fiel amigo de Mahoma y padre de Aisha, tercera mujer del profeta. Por otro lado Alí, primo del profeta y esposo de su hija Fátima. Finalmente se eligió a Abu Bakr como sucesor de Mahoma. Años más tarde, tras la muerte de Abu Bakr y el nombramiento de otros califas, Alí reclamó su derecho califal. Lo consiguió pero sus detractores fueron muchos y muy violentos, lo cual originó una guerra entre sus defensores y sus detractores. Este conflicto acabó con la muerte de Alí. El acto definitivo que llevó a la separación de las dos ramas mayoritarias fue el asesinato de los dos hijos de Ali: Husayn y Hasan a manos de los sunies.

Arabia Saudita es la principal potencia sunita actualmente, es la rama que pertenece la inmensa mayoría de los musulmanes.

Irán es la principal potencia de musulmanes con la fe chiíta.

Expansión del islam

Minucias de legados y herencias aparte, el Islam se expandió por el Mediterraneo durante los siglos VIII-IX

Conquistas musulmanas, el califato Ortodoxo o Rashidún, el Califato Omeya, y el califato Abasida.

Allí por donde pasaron dejaron muestras de su cultura y en todas las facetas humanas sentaron cátedra.

Y todo este rollo para qué

Retomando el inicio de este texto, a Salman Rushdie lo apuñalaron cuando estaba a punto de iniciar una conferencia en New York en 2022. Alguien subió al escenario y empezó a dar puñaladas a Rushdie.

Un poco de historia contemporánea

En 1979 sucedió lo que llaman “Revolución islámica”, esto es que el Ayatollah Jomeini (1902–1989) retornó desde su exilio francés a Irán. El Sha Reza Pahlevi (1919–1980) tenía a los chiítas hasta las narices. El Sha tuvo que exiliarse y el Jomeini se quedó con el país.

El 1 de abril “tras una abrumadora victoria en un referéndum”, Jomeini proclamó la República Islámica a la que pronto se dotó con una Constitución que reflejaba los ideales del gobierno islámico. Inmediatamente se tomaron medidas fundamentalistas y comités revolucionarios patrullaron las calles para obligar a cumplir los códigos de comportamiento y vestido. Mientras el régimen trataba de borrar cualquier vestigio de influencia occidental.

Las mujeres en 1975 podían ir a la universidad, luego ya acceder a puestos laborales de su profesión, pues era otra cosa. Pero lo que sucedió en 1979 pilló por sorpresa a todos.

La imposición de la teocracia, la supremacía del poder religioso en la política, y la tutela absoluta de los juristas islámicos dieron paso a un recorte de libertades con impactos socializadores y politizadores sobre la Mujer, la Medicina y la Educación. La libertad de expresión la cercenaron de raíz. Se acabó la música, ni pop, ni metal, si pillaban a alguien tres veces bebiendo alcohol, a la horca. Los hombres y mujeres no pueden compartir espacios si no hay parentesco entre ellos. El hijab es obligatorio.

Aquí hay que hacer un apartado especial porque entramos en terrenos fangosos.

En 1936, el sha de Persia emitió un decreto conocido como el ‘Kashf-e hijab’, una norma que prohibía todo tipo de velos islámicos, desde el chador hasta el hijab. La norma, aceptada en parte por la sociedad más próxima a occidente, tuvo muchas implicaciones: en cuanto se aprobó, fue implementada de manera rápida, enérgica… y agresiva. La Policía tenía permiso para retirar físicamente el velo a toda mujer que lo llevara puesto en lugares públicos, y muchas mujeres fueron golpeadas, despojadas de sus velos islámicos — incluidos los chadores — y sus viviendas registradas. Algunos estudios afirman que varias mujeres llegaron a suicidarse para evitar quitarse el hijab.

La cuestión de los hábitos y costumbres en las vestimentas es algo que está por aclarar, habida cuenta de que hay mujeres que no quieren/pueden dejar sus cabelleras al aire porque entre otras cosas “las cabelleras de las mujeres son fuente de pecados de los hombres”. Históricamente, corporalidad, desnudez y cabellera femeninas han sido objeto de seducción, estigmatización y consumos culturales, predominantemente masculinos. Los chiitas “tienen la necesidad” de tapar lo más posible el cuerpo de la mujer porque “está claro que la mujer es la que incita a pecar al hombre”, tal es el grado de misoginia que estos seres emanan.

Los turbantes de los hombres también tienen sus significados

Mahoma, conocido como el tejedor del turbante, creía que el tocado representaba la piedad, dignidad y masculinidad y lo usaba como una forma de distinguir a los musulmanes de otras civilizaciones árabes que usaban vestimentas parecidas.

Bueno, pues así las cosas con esta “revolución teocrática” por medio. El Ayatohlla Jomeini estaba a sus anchas en Irán haciendo y deshaciendo lo que le parecía, en nombre o no de su diosito y sus profetas.

Hasta que llegó el año 1989 y Salman Rushdie acababa de publicar “Los versos satánicos”. Una novela, una simple novela.

Jomeini, que se consideraba descendiente directo de Mahoma, murió en 1989, pero le dio tiempo a liarla parda a nivel internacional con sus delirios de blasfemias, anatemas y herejías. Este ayatollah decía que era el representante de Alá en la tierra, ahí, con sus dos gónadas. Con esa delirante autoridad Jomeini el 14 de febrero de 1989 anunció que Salman Rushdie ha sido condenado a muerte por blasfemo como autor de la novela Versículos satánicos, y pidió a los musulmanes que le ejecuten allá donde le encuentren.

“Hago saber a los orgullosos musulmanes de todo el mundo que el autor de Versículos satánicos, libro que va contra el islam, el, profeta y el Corán, y todos los implicados en su publicación que eran conscientes de su contenido, han sido condenados a muerte”, decía el mensaje de Jomeini transmitido por Radio Teherán, según la traducción hecha pública en el Reino Unido.
“Pido a todos los musulmanes que los ejecuten allá donde los encuentren”. Si perecen en el intento serán considerados mártires, de acuerdo con el mismo mensaje. Esta amenaza es el punto culminante de una campaña contra la novela -publicada el año pasado en el Reino Unido y prohibida en la India, Pakistán, Egipto y Suráfrica- alcanzado después de un fin de semana con sangrientos disturbios en Pakistán y la India que costaron siete vidas y decenas de heridos.

“En el nombre de Dios, Somos de Dios y a Dios volveremos.
Estoy informando a todos los valientes musulmanes del mundo que el autor de ‘Versos satánicos‘, un texto escrito, editado y publicado contra el Islam, el Profeta del Islam y el Corán, junto con todos los editores y editoriales conscientes de su contenido, están condenados a muerte. Hago un llamamiento a todos los musulmanes valientes, dondequiera que se encuentren en el mundo, para que los maten sin demora, para que nadie se atreva a insultar las creencias sagradas de los musulmanes en lo sucesivo. Quien muera por esta causa será mártir, si Dios quiere. Mientras tanto, si alguien tiene acceso al autor del libro pero es incapaz de llevar a cabo la ejecución, debe informar a la gente para que sea castigado por sus acciones.
Que la paz y las bendiciones de Alá estén con ustedes”.

La República Islámica de Irán en 1989 se rige por la sharia, algo que puede fomentar y amparar acciones terroristas llevadas a cabo por los fundamentalistas fanáticos. El mandato jurídico que lanzó Jomeini contra Salman Rushdie tiene carácter universal.

Esto suponía que “cualquier buen musulman” tenía el cielo ganado por cometer un atentado criminal contra Rushdie y contra los cómplices editoriales que se atrevieran a “difundir el mensaje herético”. Jomeini ofreció una jugosa recompensa, y por supuesto, la eterna promesa de reunirse directamente con Mahoma en el paraíso en calidad de mártir, con sus correspondientes huríes (mujeres vírgenes).

El considerar blasfema contra el islam la novela “los versos satánicos” supone un atentado a la libertad de expresión.

El propio Salman Rushdie dijo:

Las religiones, como todas las otras ideas, merecen críticas, sátiras y sí, nuestra falta de respeto sin miedo.

La novela de Rushdie parece que cumple, según los fanáticos religiosos, con la trilogía antirreligiosa blasfemia, herejía y anatema. Por ello la impresión y difusión de la novela con sus editores, traductores, comentaristas, críticos, distribuidores, libreros, etc., estaban en el ojo de mira “de los buenos musulmanes” que debían seguir el edicto de Jomeini.

Frente a dicha amenaza el libro no fue publicado en muchas naciones, incluyendo a países “altamente civilizados” y “celosos de los derechos humanos” como Alemania.

Este hecho llevó al escritor germano Peter Priskil a declarar que en la Feria del libro de Frankfurt, de 1989, “no se hallaba presente el autor más importante del orbe”.

Parece ser que lo que le mosqueó al Jomeini fue la posible/presunta insinuación de que la literatura puede sustituir a la palabra del diosito de turno. Y claro, una “presunta afrenta al diosito de turno” tiene sus consecuencias en el mundo musulmán. India prohibió el libro el 5 de octubre de 1988, y Sudáfrica el 24 de noviembre. Al cabo de varias semanas, Pakistán, Arabia Saudita, Egipto, Somalia, Bangladesh, Sudán, Malasia, Indonesia y Qatar también habían prohibido la novela.

Las vivencias personales de Rushdie de la inhumanidad de la guerra se transforman en humor lapidario contra los ayatolas y otros profetas iluminados que han puesto a la humanidad en la catástrofe.

Para muestra el inicio de la novela en que narra cómo un actor precario, llamado Gibreel Farishta, cae al vacío tras la explosión del avión en que está viajando, pues bien, Gibreel está cantando “a voz en grito”.

Resulta que Salman Rushdie tuvo apoyos entre los propios musulmanes, iraníes exiliados firmaron declaraciones de apoyo. Pensadores, escritores, periodistas y académicos del mundo musulmán.

La recompensa por la cabeza del escritor aumentó hasta los 4 millones de dólares, a pesar del proceso de normalización de las relaciones entre Irán y Occidente.

El Vaticano condena la novela y la califica de “irreverente y blasfema”

Parece ser que el 5 de marzo 1989, el Vaticano condena la novela a través del L’Osservatore Romano, calificándola de irreverente y blasfema; también critica la condena de Jomeini. No he encontrado algo al respecto más lo que dice la prensa en 1989 https://elpais.com/diario/1989/03/06/internacional/605142021_850215.html

El derecho a la blasfemia es la libertad de considerar al dogma religioso como una narrativa más, y por ende susceptible a la crítica a la que se somete a cualquier otra.

Y ahora qué

Irán ha culpabilizado a Salman Rushdie del ataque sufrido.

https://twitter.com/el_pais/status/1559166768735666181

El portavoz del ministerio de Exteriores iraní culpabiliza al escritor “por insultar a 1.500 millones de musulmanes”. Eso sí, rechaza cualquier vínculo con el atacante, “no vaya a ser que pida la recompensa”.

Jomeini declaró apóstata a Salman Rushdie, “cuando alguien es declarado apóstata está permitido matarlo” dijo el clérigo Yalal Mohebí

Yalal Mohebí, uno de los clérigos que habló sobre el ataque a Rushdie, como se ve lleva el turbante negro, este se cree descendiente directo de Mahoma

El presunto atacante Hadi Mattar (de 24 años, estadounidense de origen libanés), a quien especialistas en radicalismo islámico identifican como simpatizante de Irán y de la Guardia Revolucionaria Islámica, considerada el ala dura del régimen iraní. Naser Kanani (portavoz del ministerios de Asuntos Exteriores iraní) consideró “completamente contradictorio condenar la acción del agresor y absolver la acción del que insulta las cosas sagradas e islámicas”.

También dijeron perlas como estas:

“En este ataque, sólo Rushdie y sus partidarios merecen ser culpados e incluso condenados”, subrayó Kanani durante su rueda de prensa semanal en Teherán.

Hadi Mattar se ha declarado “no culpable” en la corte

Ira y fatua “irrevocables” de los musulmanes chiíes.

Un periódico iraní mostraba en el año 2000 a Rushdie como un hombre muerto, luego de que las autoridades afirmaran que la fatua en su contra seguía vigente.

2015 la metida de pata del papa

Con la ambigüedad que caracteriza los comunicados de prensa del Vaticano, Francisco estuvo “sembrado” cuando soltó estas perlas cuando se produjo el atentado terrorista en las instalaciones de la revista satírica Charlie Hebdo y reivindicado por la filial de Al Qaeda en Yemén, justificándolo con “había vengado a Mahoma que suele ser caricaturizado en la portada”.

El papa Francisco, sobre Charlie Hebdo: "No se puede insultar la fe de los demás"

Durante el vuelo de Sri Lanka a Filipinas, el pontífice volvió a condenar el ataque contra la revista francesa y agregó…

www.lanacion.com.ar

La libertad de expresión que no gusta a los religiosos

Llaman intolerancia religiosa al simple hecho de comentar las incoherencias religiosas. La intolerancia hacia la expresión artística queda de manifiesto cuando los religiosos alzan sus voces ante alguien. Lo que llaman la libertad religiosa atosiga y agobia a otros derechos. Legislar con tipificaciones como “ofensa de sentimientos religiosos” es la nueva blasfemia, y se produce para proteger a las confesiones mayoritarias en países como España. Judicializar en exceso el uso de esta libertad religiosa, desgastando material y psicológicamente a los acusados, permitiendo un acoso público y actualmente en redes sociales está dando beneficios a los fanáticos religiosos.

https://www.derechoshumanos.net/Convenio-Europeo-de-Derechos-Humanos-CEDH/articulo10CEDH.htm#:~:text=Toda%20persona%20tiene%20derecho%20a,y%20sin%20consideraci%C3%B3n%20de%20fronteras.

Las religiones son de ofensa fácil, la Sharia y el derecho canónico dan cuenta de lo fácil que es ofender a estos acólitos a estas religiones. Considerar que la religión está por encima de la Sociedad, el Estado y el Derecho es una golosina para los fanáticos.

https://news.un.org/es/story/2018/11/1447261

La Sharia regula no sólo las obligaciones religiosas, sino también el derecho familiar, el derecho penal, el derecho administrativo y el derecho de guerra. En la mayoría de los países islámicos, las regulaciones de la Sharia se han mezclado con el Derecho secular. Algo que anhelan los países de mayoría cristiana, y da igual que sean católicos o protestantes y sus derivaciones.

El Derecho Canónico hace lo posible para incrustarse en los asuntos políticos de países de mayoría católica.

Hombres disfrazados, llenos de supersticiones, con fantasías sobre seres imaginarios hacen lo posible para doblegar a las personas con sus dogmas religiosos.

En nombre de la libertad religiosa se coarta la libertad de expresión, fuerzan a otras personas a vivir según unas creencias que nada tienen que ver con la realidad, quieren imponer en la Educación Formal y en la Medicina sus procederes y sus supersticiones.

Establecer normas seculares laicas en los países da alergia a los religiosos fanáticos, se les acaba su futuro, se les dispara la rigidez cognitiva y empiezan a realizar conductas extremas en forma de atentados y dejando muertos por donde pasa.

No quieren darse cuenta que perdieron la guerra hace siglos.