El victimismo de los machistas
Rush Limbaug utilizó el término feminazi para cargar contra las mujeres que defendían el derecho al aborto en 1992. Como buen machista y promotor misógino escribió un libro titulado “Cómo deberían de ser las cosas” en 1992. En ese libro indicó que el creador del término feminazi fue un amigo suyo, profesor de economía en la Universidad de California, Tom Hazlett, que empleó la palabra por primera vez en un ensayo publicado en 1989.
En 1990 Rush Limbaug marcó el camino a políticos y periodistas que en USA llaman conservadores, en España se les llamaría de “extrema derecha”. Estar a los mandos de un programa de radio titulado “The Rush Limbaugh Show” durante 32 años dejó suficiente ideología en las ondas como para conseguir en 2020 la Medalla Presidencial de la Libertad que le otorgó Donald Trump.
Con este bagaje social que le dieron los privilegios de ser un macho blanco y ricachón, Rush Limbaug, ha ido describiendo al movimiento feminista en base a lo que él considera que son sus integrantes, generalizó el término feminazi para conseguir objetivos empresariales. Los detractores del movimiento feminista se hicieron con ese término y se ha convertido en la palabra más repetida del movimiento antifeminista en distintos lugares del planeta. Estos machinazis han vendido discursos que han hecho mucho daño a las mujeres actuales. De hecho el retroceso en derechos sociales que se está viviendo en USA estás dando muestras de una #EnvidiaFatwa que da hasta pavor.
La RAE no incluyó el término feminazi en el diccionario, sí puso una “explicación” de dónde proviene ese término alegando que una feminazi es una feminista radicalizada. Bueno, mejor dicho “con el sentido de una feminista radicalizada” para indicar que no hay que ser feminista radicalizada, hay que ser feminista como quiere el patriarcado misógino que se sea.
Desde entonces muchos hombres se han preocupado de la “verdadera igualdad” porque las feminazis “no tienen idea de igualdad”. Según estos hombres el movimiento feminista tiene que regirse por los cánones establecidos por estos hombres de masculinidad herida, vulgarmente llamados machinazis, y que usan la provocación para sentirse más hombres. Estos hombres que abogan por la “verdadera igualdad” quieren una mujer domesticada. A las “señoras hay que domesticarlas porque su lugar es ser cocinera, doncella, costurera, bordadora, zurcidora, planchadora, recadera, enfermera, contable, economista, maestra e higienista y alguna ramificación no profesional de estas labores/profesiones. Prepararse para ser madre con tres ingredientes: buena patriota, buena cristiana y buena esposa tiene que ser el cometido principal de la mujer, a eso lo llaman “mujer de alto valor” y si encima la mujer se ha mantenido sin relaciones sexuales durante su adolescencia y juventud, mucho más valor, según la misoginada. La familia y el hogar son los principales ámbitos de actuación de la mujer sin olvidar las labores asistenciales. Cosificar a las mujeres parece que es el objetivo de estos “hombres inhumanos”.
Origen de la “verdadera igualdad” española
Ni Rush Limbaug ni Tom Hazlett nos tienen que explicar a las españolas qué es el machinazismo. Venimos de una tradición altamente machinazista que todavía tiene algunos rescoldos de poder en nuestro país. Las relaciones entre el fascismo español y el nazismo alemán fueron muy evidentes. Las organizaciones femeninas de aquella época en estos dos países tenían una fuerte influencia social, algo que no han reflejado los historiadores e investigadores. Simplemente se ha ignorado estas ramas del fascismo español y del nazismo alemán.
-Ten preparada una comida deliciosa para cuando él regrese del trabajo. Especialmente, su plato favorito.
-Ofrécete a quitarle los zapatos. Habla en tono bajo, relajado y placentero.
-Retoca tu maquillaje, coloca una cinta en tu cabello. Hazte un poco más interesante para él. Su duro día de trabajo quizá necesite de un poco de ánimo, y uno de tus deberes es proporcionárselo.
-Durante los días más fríos deberías preparar y encender un fuego en la chimenea para que él se relaje frente a él. Después de todo, preocuparse por su comodidad te proporcionará una satisfacción personal inmensa.
-Escúchale, déjale hablar primero; recuerda que sus temas de conversación son más importantes que los tuyos.
-Nunca te quejes si llega tarde, o si sale a cenar o a otros lugares de diversión sin ti. Intenta, en cambio, comprender su mundo de tensión y estrés, y sus necesidades reales.
-Si tú tienes alguna afición, intenta no aburrirle hablándole de ésta, ya que los intereses de las mujeres son triviales comparados con los de los hombres.
-Recuerda que debes tener un aspecto inmejorable a la hora de ir a la cama… si debes aplicarte crema facial o rulos para el cabello, espera hasta que él esté dormido, ya que eso podría resultar chocante para un hombre a última hora de la noche.
-En cuanto respecta a la posibilidad de relaciones íntimas con tu marido, es importante recordar tus obligaciones matrimoniales: si él siente la necesidad de dormir, que sea así no le presiones o estimules la intimidad. Si tu marido sugiere la unión, entonces accede humildemente, teniendo siempre en cuenta que su satisfacción es más importante que la de una mujer. Cuando alcance el momento culminante, un pequeño gemido por tu parte es suficiente para indicar cualquier goce que hayas podido experimentar. Si tu marido te pidiera prácticas sexuales inusuales, sé obediente y no te quejes.
Estos hombres que consideran que la verdadera igualdad pasa por la sumisión de la mujer al hombre se sustentan en tradiciones políticas y religiosas, viene dada por una estructura social marcada por una dictadura brutal que vivimos desde 1939 hasta 1975 en que murió el que dio el golpe de estado, un tal Francisco Franco y que provocó una guerra civil. Las instituciones políticas y sociales de los allegados a Francisco Franco pusieron las bases de lo que debía “ser la mujer” porque según ellos:
“La vida de toda mujer no es más que un eterno deseo de encontrar a quien someterse. La dependencia voluntaria […] es el estado más hermoso, porque es la absorción de todos los malos gérmenes — vanidad, egoísmo y frivolidades — por el amor.” (Medina, revista de la Sección Femenina, 13 de agosto de 1944.)
Estaban siguiendo paso a paso los preceptos de “cómo tenía que ser la mujer aria”.
Al dictador Francisco Franco Bahamonde se le adjudicó un carácter y propósito divino, su presencia se convierte en símbolo de la lucha “entre el bien y el mal”. La mujer tenía que ser un instrumento fundamental de esa lucha.
Se instauró el servicio social de la sección femenina en 1934. Durante los primeros treinta años del siglo XX la mujer fue adquiriendo puestos públicos. La mujer iba ganando avance social notorio, algo que no gustaba a los patriarcales fascistas que hacían lo posible para usar su influencia. El partido Falange Española creado en octubre de 1933 por José Antonio Primo de Rivera compartía con las derechas tradicionales la idea de que el papel de la mujer tenía que desarrollarse principalmente en el hogar y propugnaba un ideal social basado en la división de los roles según el sexo. Había que mantener la oposición feminidad/masculinidad dando por sentado que lo femenino se define por contraposición a lo masculino.
Los acólitos de Francisco Franco vendieron que su golpe de estado y posterior guerra (con apoyos de los regímenes de Mussolini y de Hitler) era una “cruzada”, y así el más rancio conservadurismo proveniente del nacional-catolicismo unido a las más extremas adoctrinaciones fascistas y totalitarias que consideraban que la iglesia, la falange y el ejército fueron los pilares básicos de ese nuevo régimen que se está construyendo a base de sangre, dolor y duelos. Se autoconvencieron que el catolicismo estaba perseguido y eso fue la justificación del golpe de estado. El clero estaba completamente implicado en este negocio de la guerra civil española. La guerra civil se convertía así en la cruzada en defensa del catolicismo.
Llamaron “el obispo de la cruzada” a un sanguinario llamado Pla y Deniel, una miseria humana que calificó de cruzada el golpe de estado y la guerra civil que trajo.
La pornografía católica del momento era una teoría de la conspiración fantasiosa, con aspiraciones de imperios pasados y de una inhumanidad superlativa.
Con estos menesteres divinos como objetivos los atributos masculinos como la inteligencia, la fortaleza, el valor, la capacidad de iniciativa, etc., se contrapone a una mística de la femineidad basada en los atributos que estos hombres dan a las mujeres: profundo sentimiento maternal, debilidad natural frente al hombre, religiosidad y algo que denominaron “intuición femenina” que es la idea de que la mujer posee un tipo de inteligencia en la que predomina el sentimiento frente a la razón, y se presupone un antiintelectualismo inherente a la condición de mujer. Todo eso jaleado y palmeado por la curia eclesiástica española, la del Vaticano que estaba a pachas con Mussolini y con el nazismo alemán y que proveían de material bélico a los que dieron el golpe de estado.
La mujer queda relegada a ser un elemento auxiliar del hombre. Igualar a la mujer y al hombre “sería ir contra natura” con el consiguiente deterioro de su femineidad.
Así se forjó “la leyenda de una divina dictadura” a la que la mujer no tenía cabida en la esfera pública a no ser que fuera acompañante de su marido, lo que se ha llamado “mujer florero”.
Apropiaciones culturales de una cultura de la violación
El régimen de terror que supuso la dictadura franquista se apoyó en múltiples ritos festivos imaginados como tradicionales para renovar vínculos y memorias sociales. Estos espacios festivos se instrumentalizaban para afirmar esa cosa que se llamó el nacionalcatolicismo y dar rienda suelta a las ideas fascistas del dios, patria, bandera. El afán del dictador Francisco Franco por extender su control e influencia a todos los rincones de la vida social española se hizo patente muy rápido. Desde 1937 se sistematizó oficialmente “lo que sería el panorama festivo de la dictadura franquista”.
Las mujeres en España perdieron los derechos y libertades que habían conseguido en las primeras décadas del s. XX. Emergió eso que llamaron una “nueva feminidad” que estaba anclada en la más rancia tradición cristiana. Al formarse las organizaciones nacionales como la Sección Femenina o Acción Católica empezó la influencia ideológica que planteaba que las mujeres eran una amenaza. Las estrategias adoctrinadoras se plantearon el los despachos de los obispos y de los militares. Así que tras la guerra y para “igualar” a las mujeres que se resistían a las órdenes de estas organizaciones las sometían a las más crueles formas de violencia: asesinatos, encierros, fusilamientos, rapados y violaciones estaban a la orden del día. Había que imponer el patriarcado como fuera, la masculinidad evolucionó a una remasculinización y a explotar su conservadurismo sexual.
En los ámbitos científicos españoles también encontramos “investigaciones” que atentaron contra los Derechos Humanos. A un amigo de Francisco Franco se le metió entre ceja y ceja que las mujeres presas poseían un gen rojo que había que extirpar. Ese indeseable se llamaba Antonio Vallejo Nágera y dirigió en 1938 un estudio sobre prisioneros de guerra para determinar qué malformación llevaba al marxismo. Cuando terminó la guerra insistió en su investigación con mujeres a las que habían apresado “por rojas”.
Que los hombres se dedicaran a la productividad laboral suponía que el Estado estaba muy implicado en reducir el trabajo de la mujer fuera de casa, mucho énfasis en aumentar la natalidad y defender eso que se llama la “familia cristiana”. Por supuesto que la homosexualidad estaba penada y se persiguió legal y públicamente.
Ser hombre
En ese momento ser “hombre” suponía ser bastante inhumano. Los años del hambre pasaron por una sumisión de hombres trabajadores que hacían hasta 15 horas al día y no tenían para comer ni él ni su familia, mientras los afines al régimen exploraban sus nuevos estándares de falangista, buen marido y padre católico. En el primer grupo de hombres se acrecentaba la impotencia y la frustración, en el segundo grupo se impuso un discurso viril con un militarismo imperialista sin imperio, con un culto al cuerpo que tenía la imperiosa necesidad de acallar a ese feminismo internacional que estaba intentando sentar las bases de la igualdad. Este “hombre” inhumano percibió la emancipación de las mujeres como una pérdida de autoridad masculina que consideraba inaceptable, y síntoma de una decadencia nacional que no podía consentir.
La victoria de los aliados en la IIWW trajo un mito al imaginario del nacionalcatolicismo español. A alguien se le ocurrió que España era la “depositaria de los auténticos valores de la civilización cristiana” con “sus verdaderos valores de la fe, ser un martillo de herejes o la vigía de Occidente”, todo muy rimbombante y que sólo servía para que los hombres violentos afianzaran aún más su poder ebrio de un fantasioso imperialismo. Adquirir la conciencia de ser “reserva espiritual” no costó mucho. El dirigir un país como si fuera un cuartel facilita mucho las cuestiones de inculcación ideológica ya que cuando las libertades no están, se vigila al ciudadano muy estrechamente y no hay garantías de ningún tipo ir introduciendo teorías de la conspiración que apalanquen mitos como “ser la reserva espiritual de Occidente” es relativamente fácil.
Ser mujer
La mujer es un ser considerado inferior al hombre, supeditado a él y considerada menor de edad pues la tutela en asuntos sociales pasaba del padre al marido. Tenía que aspirar a ser madre abnegada y obediente esposa. El pensamiento nacional católico español impregnaba el ciclo vital de la mujer, el Fuero de Trabajo estipuló que cuando una mujer se casaba estaba libre del taller y la fábrica. Según esta ideología nacionalcatólica la mujer ha sido creada para cumplir con la misión de ser madre y para eso tiene que aprender para cumplir como era debido. Proponían un atraso innato en la mujer para que en ella se refugiara la Iglesia, los maridos, y cuidar padres y familiares. El ideal de la mujer era el sacrificio, la obediencia y la subordinación. Cualquier atisbo del movimiento feminista que en otros países iban abriendo caminos en España era tratado como algo satánico y antinatural y muy antifemenino. La mujer era un ser pasivo y así se debía mantener.
En la dictadura franquista los dos componentes del nacional catolicismo, falangismo y catolicismo, coinciden en la exaltación del patriarcado y la glorificación de la maternidad. Las mujeres son productoras y reproductoras de hijos. El aislamiento en el espacio doméstico, repudiada de los ámbitos productivos y políticos reforzaba la idea de que la condición femenina era innata y vocacional hacia la maternidad. Por supuesto que era menester considerar que las “amas de casa eran improductivas” sus labores no tenían valor y estaban supeditadas a la protección y supervisión del marido. El varón aporta el salario y da una parte a la mujer para proporcionar y cocinar alimentos, limpieza e infinidad de pequeñas tareas sin fin de la casa.
La igualdad franquista
La Constitución de 1931 otorgó a las mujeres derechos como la igualdad con respecto al hombre. Ejercer el voto en igualdad de condiciones que el hombre fue uno de esos derechos. Eso duró poco, el golpe de estado franquista y la posterior dictadura implementó una situación en que las mujeres estaban al servicio del machinazismo estatal imperante. Se institucionalizó en 1937 el Servicio Social de la Mujer obligatorio para mujeres entre los 17 y 35 años de edad que estuvieran solteras, para trabajar en hospitales, comedores, etc. De esta forma, el Estado conseguía mano de obra gratuita. Era una de las formas de mostrar ese mito de “que a la mujer le gusta cuidar”.
La iglesia también montó su chiringuito en 1941–42 llamado Patronato de Protección de la Mujer, sí, a esta gente eso de la “protección de la mujer” les ponía mucho. Este aparato de lucha contra la inmoralidad fue presidido por Carmen Polo de Franco, la mujer del dictador Francisco Franco. El objetivo de esta cárcel moral, dependiente del Ministerio de Justicia franquista, era mostrar su aparato represivo utilizando palabras como “la decencia, el recato, la castidad…”. Su objetivo era aplicar terapia de reclusión para liberar a la mujer de aquellas prácticas que entraban en conflicto con el régimen dictatorial. Se atribuían funciones preventivo-redentoras y hasta finales de los 80 del s. XX se dedicaron a controles de bailes, cines y playas, la homosexualidad, el uso de estupefacientes, la prostitución o los abortos y la nupcialidad. La constante violación de Derechos Humanos hacia las mujeres era la seña de identidad de esta institución.
La maquinaria eclesiástica
La figura del dictador Francisco Franco se idealizó en 1939 con un libro titulado “Catecismo Patriótico Español” escrito por Albino González Menéndez-Reigada (1881–1958).
Este libro, instrumento de adoctrinamiento de obligado aprendizaje en las escuelas durante la primera posguerra, dejaba muy claro que el dictador Franco tenía “la misión divina de derrotar a los bolcheviques e hizo de España una, grande, libre, católica, imperial y madre de 20 naciones”. Describió las características del “estado totalitario cristiano” que era España: “hermandad, jerarquía y servicio”. También dejó claro que los enemigos de España eran: el liberalismo, la democracia, el judaísmo, la masonería, el capitalismo, el marxismo y el separatismo. Por supuesto que ningún patriota español podría cooperar con alguno de estos enemigos. A la guerra civil la llamaron “la gran cruzada” donde “estos endémicos quedaron vencidos, pero no aniquilados”. El machinazismo español estaba en marcha.
Por aquel entonces el jefe de la iglesia era un tal Eugenio Pacelli al que llamaban Pío XII (fue papa de 1939 hasta 1958). Entró a ser Papa el 02 de marzo de 1939. Emitió un radiomensaje el 16 de abril de 1939 (Franco declaró la victoria el día 01 de abril de 1939) en el que marcó el más nefasto camino del adoctrinamiento católico en España. Acababa de instaurar “la reserva espiritual de Occidente” (la otra reserva espiritual era Italia).
La conexión de Pío XII y Hitler estaba más que clara. John Cornwell escribió “El Papa de Hitler” y ahí dijo: “Papa ideal para el indecible plan de Hitler”.
En septiembre de 1939 Hitler envió tropas para invadir Polonia. Pío XII escribió una encíclica el 20 de octubre de 1939.
Diciendo lo que siempre dicen los papas y es que: “los católicos tienen que estar unidos en Cristo” con mucha verborrea escrita y ensayada por dos milenios.
Consideraciones generales de la “igualdad” según la dictadura franquista
La miseria de la posguerra se cebó especialmente con las mujeres.
- Se diseñó un prototipo de mujer.
- Había un marco social y cultural de la más rancia y retrógrada cultura católica.
- La mujer debía “proporcionar hijos a la Patria”.
- La mujer debía ir convenientemente vestida.
- Las mujeres jóvenes no debían salir solas ni ir acompañadas de hombres que no fueran de la familia.
- El Código Penal castigaba duramente a la mujer que cometiera adulterio.
- Exaltaba la deshonra que suponía para la familia una madre soltera.
- Había más de mil cien prostíbulos censados en España conocidos como “casas de tolerancia” que pagaban sus impuestos y eran inspeccionados.
- La mujer como un ser inferior espiritual e intelectualmente tenía una vocación inequívoca de ama de casa y madre.
- Consideraban superflua la formación para las mujeres más allá de la enseñanza primaria.
- Se enmascaró el sometimiento de la mujer con el mito de la “virgen” receptáculo del amor y la vida.
- Hubo una limitación jurídica de la capacidad de la mujer mediante el control de su cuerpo y actitudes.
- Establecieron despidos forzosos de las trabajadoras al contraer matrimonio.
- La mujer casada continuó necesitando el permiso de su marido para firmar contratos de trabajo, ejercer el comercio y usufructuar su salario. Esto empezó a cambiar en 1961.
- La autorización marital para firmar un contrato laboral y ejercer el comercio sería abolida en la reforma de los Códigos Civil y de Comercio de 1975.
- Los salarios de ambos cónyuges constituían bienes gananciales, cuya administración siguió correspondiendo hasta 1981 al marido.
- Lo que se conocía como “licencia marital” se mantuvo hasta la reforma legislativa de 1975.
- La Ley de Educación Primaria de 1945 segregó la escuela durante 30 años.
Estos preceptos patriarcales eran muy seguidos por el régimen dictatorial que “tenía ojos en todas partes”. Este marco que envolvía a la sociedad española, con más hambre que dignidad, que pregonaba que el sufrimiento era el bien para alcanzar la gloria, con sus conductas llenas de simbolismos religiosos sigue resonando aún hoy en la ideología latente y subyacente de algunos .
La religión del estado, el estado de la religión
En 1953 se firmó el Concordato entre Ciudad del Vaticano (lo que suelen llamar la Santa Sede) y España.
Este acuerdo Estado-Iglesia se firmó en una España aislada internacionalmente. No se cuestionaba la realidad de la confesionalidad católica de España. Se firmó jurídicamente el espíritu del nacionalcatolicismo que indicaba la consustancialidad entre la religión católica y la nación española. Se confirmaba lo que Pío XII había emitido por radio en 1939, tanto España como Italia eran la “reserva espiritual de Occidente”.
Un título honorífico que traía más miseria a los pobres, más inhumanidad y cosificación a las mujeres, más poder a los falangistas y los hombres aspirantes a poderosos tenían más sentimiento de ser “los hombres de Franco”.
Hubo algunas fases que establecían este lema con sangre. Desde 1939 hasta 1945 se persiguió toda forma no católica. En 1945 se monta el Fuero de los Españoles.
En 1953 se firma el concordato con el Vaticano y con ello se explota aún más el concepto de “la Hispanidad” con componentes mesiánicos e imperialistas. Este intento de lavado de cara exportaba una imagen al exterior autoritaria y no totalitaria, mientras que en el interior se vivía sin libertades, con hambre, con expolios, con llantos por los desaparecidos y por la fuerza, mucha fuerza bruta que ponía las cosas en su sitio según la maquinaria del Estado.
Ese mismo año y para demostrar que España era muy internacional se firmaron los pactos de Madrid con USA para montar cuatro bases militares en España a cambio de apoyo económico y militar. En ese momento, encima de tener una incívica postguerra, teníamos vasallaje a EE. UU. Claro, la lucha contra el comunismo unió a los políticos delirantes de España y USA.
España era muy internacional se firmaron los pactos de Madrid con USA para montar cuatro bases militares de España a cambio de apoyo económico y militar. En ese momento, encima de tener una incívica postguerra, teníamos vasallaje a EE. UU. Y por otro lado oficialmente éramos “reserva espiritual de Occidente” que lo habían dicho clarito en el Vaticano
https://ebuah.uah.es/dspace/handle/10017/2094?show=full
https://www.cervantesvirtual.com/portales/espana_eeuu_transferencia_cultural/cronologia/
https://www.filmaffinity.com/es/film435869.html
El cine español dejó claro el espíritu de “Los Pactos de Madrid” en la película “Bienvenido Mister Marshall”. La película nos contó la versión alternativa a lo que el NO-DO esparcía.
Y toda esta introducción para qué
Algunos machinazis modernos están diciendo “quita feminazi que tú no sabes de igualdad”. Lo dicen a través de libros, de podcast, vídeos, charlas en aparentes seminarios, formaciones, másteres de chichinabo, encuentros con el alfa y demás plumas de pavo real del macho humano que exhiben. Algunos hombres explican a las mujeres “cómo hay que ser de feminista para encajar en los roles sociales que la misogininada de los machinazis promueve”.
Estos machinazis exhiben unos discursos en los que las teorías de la conspiración, los bulos y las desinformaciones están visibles. Por aquí expuse cómo utilizan la Ciencia para justificar delitos en base a una supuesta supremacía biológica del hombre sobre la mujer y que es el fundamento de cualquier chorrada que se les ocurra a estos aspirantes a seres humanos machos.
Considerar que el macho humano “debe ser” valiente y seguro de sí mismo. Tiene que ser decisivo y tener madera de líder. No puede tener miedo a nada porque ha seguido un curso de acción planificado que bien le ha costados sus euritos. Así que ese machinazi está preparado para soltar las barbaridades más inhumanas porque “él lo vale”. Y no dudará en soltarlas porque tiene averiado el sentido de la inhibición.
La diputada de VOX por Almería Rocío de Meer en un alarde de la más absoluta nada ya propuso en marzo de 2023 cambiar “la ideología de género por la ideología del éxito”, y sigue con sus pamplinas de “yo sé mejor que nadie qué es ser una feminista”.
Un “alguien escribiendo en un periódico” está muy preocupado porqeu no consigue comprender el concepto de “besar si te dan permiso”. PArece que es algo complicado en algunos machos.
Tenemos a muchos machos diciendo lo que tiene que ser “el buen feminismo”.
Ejemplos de “buenos feministas”
El ejemplo patrio más moderno lo tenemos con Luis Rubiales, el prototipo de “como soy macho puedo usar el cuerpo de las mujeres como mejor me venga y a la par gano mucho dinero de chanchullo y pifostios varios”.
La igualdad no es diferenciar cuando hay — una opinión entre lo que dice el hombre — y lo que dice la mujer No hay que — diferenciar entre — la verdad y la mentira — y yo estoy diciendo la verdad hoy aquí — hijas aprenderlo es una lección de vida — vosotras sí soy feministas de verdad no — el falso feminismo que hay por ahí — el falso feminismo — no busca la justicia — no Busca la verdad no le importan las personas — lo repito están preparando una ejecución — para ponerse una medalla y decir que — están avanzando pero sí que así no — estamos avanzando es todo lo contrario — Todo lo contrario han tardado cuatro o cinco días en felicitarnos por el mundial — Eso sí intentar matar a un hombre por — esta situación desde el primer momento — no le importan las personas — miren — la señora Yolanda Díaz — la señora Montero — la señora blarra — el señor echenique — se han referido a este a esta acción con la palabra bejar violencia sexual — sin consentimiento repito parte de la clave sin consentimiento agredir — por Dios Qué Pensarán las mujeres de — verdad que han sido agredidas — sexualmente — Qué pensará una mujer que de verdad — se le ha obligado y se le ha agredido — sexualmente — a estas personas — que han dicho esto de mí que me han acusado — que están tratando de asesinarme — públicamente — me voy a defender — me voy a defender como cualquier español — donde se tiene que defender en los juzgados voy a ejercer acciones contra — estas personas- La falsa feministas — que destrozan a las personas que no nos — felicitaron por ser campeones del mundo — Jorge porque también había hombres allí — son campeonas las 23 jugadoras las que — más — pero no eres campeón tú no eres campeón — Carlos el entrenador de portero o Ruby — Rubén- son campeones también había hombres y — mujeres un grupo y el plural el plural — masculino en España incluye tanto a — mujeres como hombres por lo tanto no nos — acomplejemos y sigamos utilizando — campeones para hablar de hombres y mujeres todos ustedes todo el fútbol — español son campeones del mundo del — mundial de Fifa femenino todos ustedes.
El discurso que dio Luis Rubiales explicando qué es el feminismo en una asamblea extraordinaria de la RFEF indicando cuánto iba a cobrar el entrenador de la selección es de las cositas más supremacistas que nos encontramos en las redes y medios de comunicación.
Algunos actores se han encomendado a San Indignado porque son así de “especiales”.
Que una cara como la del actor este empiece a soltar babosadas “porque él tiene derecho a soltar piropos a las mujeres” es algo que da mucho pavor.
Conclusión
Los machinazis de USA están tan entregados a “sus causas” que no se han enterado de lo que les pasa a su alrededor. En España supimos qué eran los machinazis allá por 1936 cuando a las mujeres nos arrinconaron, nos denostaros y nos dejaron en el ostracismo más brutal.
Nos hicieron vivir una brutal postguerra, nos vieron como la maldad a la que tenían justificadas cualquier agresión. A los que tuvieron la “suerte” de ir a colegios tienen altas probabilidades que fuera objeto de deseo de algún pederasta. A veces nos casábamos para salir de la tortura de unos padres y madres inhumanos a un marido maltratador y con ansias por ejercer ese poder. Las calladas tapadoras de las madres que ovacionaban a sus maridos, padres, hijos pederastas y que ha sido causa de depresiones y ansiedades a destajo.
No, poco tienen que contarnos los machinazis de USA a las mujeres españolas. Estamos curtidas en defender al maltratador y al pederasta. Tenemos unas experiencias previas que nos han enseñado a pasar desapercibidas y a reírnos de nuestros violadores. No ha quedado otra si queríamos sobrevivir adaptados a las nuevas vicisitudes sociales que se nos han planteado en nuestros ciclos vitales.
Pero ojo, estamos combatiendo a la hidra y por fin la Historia está de nuestra parte.
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http://www.pilarmateos.es/entradablog.php?id=23&titulo=entrevista_a_vallejo-najera
https://riuma.uma.es/xmlui/bitstream/handle/10630/9100/23%20NADAL.pdf?sequence=1&isAllowed=y
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1886-58872012000300002
